FULL MOON {Raura/Rydellington}

Capítulo VIII

Me quedé mirando fijamente a ese chico, cuyo nombre era Ellington.

Cuando me lo mostró Rydel sentí algo extraño; y comprendí. Ellington era un lobo, ¿cómo era eso posible? ¡Zack! Sólo había una razón que lo explicaba todo.

¿Para qué quería más personas, Zack?

Cautelosamente escuché la conversación que entablaban sus compañeros de mesa.

Sip, esa una gran habilidad en los lobos.

—Hey, Elli—lo sacudió un pelirrojo a su lado—. Estamos aquí ¿eh?—le dijo burlonamente. Ellington reaccionó.

—Lo siento...estaba distraído—pero sabía que no era por mi hermana pequeña. Si no porque había captado lo que era yo.

—Deja de molestarlo, Calum—lo regañó una morena con el cabello rizado, lo golpeó ligeramente en el hombro riéndose—. Oh, vamos Lau, anímate—le dijo a su amiga.

Por más que quise apartar mis oídos de su conversación, algo me atrapó. ¿Qué traía esa chica para hacerme esto? Me sentía...vulnerable... ¡Que estupidez!

—Mírale el lado bueno—dijo la morena a Laura.

— ¿El lado bueno?—le contestó con sarcasmo—. Habría sido mejor que me tocara con Brad...

— ¿Estás de coña Laura?—interrumpió Ellington—. Brad solo ha sido un cabrón...—su respiración se aceleró y con ello su pulso. ¡Mierda, Ellington, contrólate! De pronto se fue calmando...no sabía que había sido el causante pero me alegraba.

En serio, cuando me encontrara con Zack, lo ahorcaría.

Laura se encogió de hombros ante el brusco comentario de Ellington.

—Además, Lau, de que te quejas...es decir, al menos te ha tocado con un chico atractivo y sexy—habló de nuevo la amiga de Laura.

— ¿Y que si lo es?—bufó Laura—Seguro que es un flojo, sería lo mismo con Brad. Ambos dejándome el proyecto, pero a diferencia de Ross, Brad no me odiaba...—balbuceó.

¿Eso creías de mí, Laura?

No la odiaba.

Aparté aquellos pensamientos sacudiendo mi cabeza.

—Ross, voy a clases—me dijo Rydel. Asentí.

No me había dado cuenta cuando había sonado la campana. Como sea, vi que Ellington fue el último en levantarse de la mesa, tomó su mochila y se la colgó en los hombros. Lo seguí por el pasillo, y en un nanosegundo lo tenía pegado en los casilleros agarrándolo del cuello con mi brazo derecho.

—Déjame—se sacudió— ¿Qué quieres?—no lo solté.

— ¿Fue Zack, verdad?—parecía algo confuso.

—Espera... ¿tú eres...?—dio un pequeño respingo—. No entiendo nada de esto...tú...

— ¿Te has encontrado con Drake?—le dije aún con mi tono severo. Ellington volvió a sacudirse, y lo apreté más contra el casillero.

—No. Yo...lo perdí de vista—contestó— ¿Puedes?—me señaló con la mirada mi brazo. Negué—Por favor...te responderé lo que quieras...pero...

— ¡Suéltalo!—una voz femenina muy familiar inundó mis oídos. Laura llegó hacia nosotros. Tomó el brazo que tenía contra el cuello de Ellington y tiró de él— ¡Suéltalo, idiota!—me gruñó.

Solté a Ellington y éste dio un gran respiro.

— ¿Qué te sucede?—reclamó Laura— ¿Estás loco o qué?