Lo más característico del clan Hyuga eran sus peculiares ojos blancos, ojos que eran muestra de su increíble legado sanguíneo.
Pero sus ojos s veces tenían destellos morados, casi lilas que les daban un brillo único. Un reflejo hermoso al mismo tiempo que peligrosos.
Los ojos que a sus enemigos les helaban la sangre, los ojos del prodigio Hyuga, el genio mayor de toda su generación, pero a ella, a ella sus ojos la veían con amor, con ternura, con deseo y protección.
Tenten era la mujer que había ablandado la dureza de su mirada y de su corazón. Pasando de tener una mirada fría e indiferente a una calida y tranquila.
La castaña de dos chongos logro lo que muchos no, y solamente ella podía disfrutar de cerca la mirada del genio cuando la besaba, podía ver a detalle esos ojos tan hermosos que tenía.
Su lugar favorito era en la noche cerca de los árboles de su campo de entrenamiento, ya que estos daban flores moradas, y con la luz de la luna el color se reflejaba en los ojos de su amado.
Ahí eran sus mejores citas además de la tienda de dangos.
Poder sentarse a platicar a la luz de la luna era algo que llenaba de paz el corazón de ambos.
Neji cada vez que iban a su lugar especial le regalaba un detalle que enamoraba más a la castaña. Desde collares a tiaras de flores hechas por el mismo.
Tenten también le daba detalles como armas con inscripciones granadas especialmente para el o lo dejas recostarse en su regazo para acariciar su cabello.
El último detalle que dejó atónito al chico fue cuando le quitó su banda ninja y con la yema de sus dedos acaricio su marca de maldición para después depositar un tierno beso en su frente.
El día que él partiera esa cosa iba a bloquear aquellos bellos ojos que tanto amaba, por el bien del clan. Aunque no quisiera pasar en ello, siendo ninjas la muerte siempre estaba presente y cerca de ellos.
Neji- Te prometí que me quedaría a tu lado siempre. No te preocupes por la marca.
Tenten- Quiciera hacerte libre de ella.
Neji se incorporo quedando cerca de ella, siempre se sentaban a la orilla del árbol que los vio crecer en su entrenamiento con Gai-sensei.
El chico le tomo una mano entrelazando sus dedos, se acercó más a ella para darle un tenue beso en los labios.
Neji- Ya lo has hecho, ya no me siento enjaulado. Puedo escoger entre lo que debo de hacer y lo que quiero. Y he elegido lo que quiero, te quiero a ti. Estar contigo y formar una familia.
Los ojos del genio tenían un brillo especial, era único en esta ocasión. Ese color morado brillaba con más intensidad que otras veces, se veía lo decidido que estaba.
Tenten con lágrimas listas por salir lo abrazo cayendo en el pasto con él.
Amaba sus ojos, desde gennin supo comunicarse con ellos, y pido entender que sus palabras no eran falsas, sus ojos no titubearon en ningúna palabra que salió de su boca.
Al contrario, el brillo crecía y crecía más con cada palabra.
Tenten- Te amo Neji.
Neji- Y yo a ti Tenten.
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