Capítulo 4: ...

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Todo parecía ir sobre ruedas, su padre cada día aceptaba mejor las románticas visitas de Jack y las desaparecidas de Hiccup, además de que solo faltaban un par de días para el cumpleaños del albino. Las chicas estaban emocionadas, ponían todo su talento en los regalos.

Jack había decidido que ese no sería solo un cumpleaños, sería la fiesta que nunca olvidarían para despedirse.

Los dos mayores ya habían decido hacia donde querían dirigir sus vidas. Rapunzel al fin saldría de la protección de su madre y estudiaría arte en la escuela que ella quería, ya tenía todo preparado y la beca era suya, aun cuando su madre no estuviera de acuerdo ella se iría. Jack por otro lado aún estaba un poco indeciso sobre el lugar, pero tenía claro cuál era su sueño y cualquiera de las opciones tenia donde llegar por lo menos el primer año.

Hiccup....él estaba nervioso, aun no sabía que obsequiarle a Jack. Siempre le resultaba muy difícil hacer obsequios, sobre todo si se trataba de Jack. Nunca olvidaría esa ocasión en la que fallo con su regalo y hasta falto a la fiesta. Jack había estado muy dolido y en esa época solo eran amigos, no se imaginaba como seria ahora que eran novios, el mayor de seguro pensaría que no le importaba o algo así. Estuvo hasta la fiesta con la cabeza por las nubes intentando encontrar un buen regalo y hasta ese día no lo encontró...bueno, a él no le parecía un buen obsequio

El día tan esperado llego, Rapunzel solo por ocio había hecho un pastel nevado para Jack y exclusivamente para él. Cosa que el albino se tomó muy a pecho y se aseguró de esconder el regalo, era algo que se comería solo y no le daría a nadie.

Todos los amigos de Jack estaban ahí, inclusive los que vivían lejos, su casa estaba llena de gente desconocida para los tres amigos, pero las chicas en poco tiempo se hicieron amigas de todo el mundo, Hiccup era el único que no se sentía encajar. No entendía como un chico tan sociable, divertido y activo se había enamorado de él que era completamente lo opuesto y vivía respondiendo con sarcasmo. Solo por Jack fingió su mejor sonrisa y se adaptó a los temas de conversación. Fue un alivio para el moreno cuando los invitados comenzaron a desaparecer y solo quedaron ellos dos en la casa. Su tío había tomado el coche para dejar a los chicos en la estación.

- No esperaba que te portaras tan bien, toda la fiesta. Normalmente desparecer a la mitad- Comento Jack jugando con algunos de sus regalos- Te quedaras a dormir verdad? Tus padres están de viaje.-

- Como haces para saber siempre dónde están?-

- North no sabe mantener la boca cerrada- Sonrió Jack, derribando a Hiccup sobre la cama.- Aun estoy esperando mi beso de "feliz cumpleaños"- Él reía y reía bromista como siempre hasta que de verdad Hiccup le beso, tomando la iniciativa de todo movimiento, dejando a Jack bajo su cuerpo, muy aturdido- Realmente....realmente no me esperaba eso.

- Eres un tonto- masculló Hiccup, sacando de su bolsillo una pequeña caja- Feliz cumpleaños snowman.- Jack se sonrojo y recibió la pequeña caja.

El mayor abría el pequeño regalo como si se tratara de lo más hermoso y delicado del universo. Normalmente Hiccup hacia regalos...divertidos de alguna forma, siempre tenían una explicación de por medio, le extraño que esa no lo tuviera, pero entendió el motivo. No necesitaba palabras.

Con una enorme sonrisa, saco la cadena de plata con el pequeño copo de nieve colgando de ella. Su nombre estaba grabado por detrás.

- Te amo- Susurro y volvió a besar a Hiccup, una, otra y otra vez. Hasta que ambos quedaron aturdidos de tanto amor y con un problema entre las piernas.- Estas duro....

- Y de quien es la culpa!?- Grito un sonrojado Hiccup, intentando levantarse, pero Jack no se lo permitió, iba a sacar total provecho de la situación.

Solo necesito frotarse contra las caderas del menor, para que este perdiera la cabeza y muchas otras partes racionales. Hiccup jadeaba y gemía intentando escapar de los roces, pero solo conseguía amplificarlos. Había cedido a sus deseos y los de Jack.

Tembloroso, nervioso y con algo de miedo se quitaba la ropa, dejándose tocar.

En ningún momento se dieron el tiempo para bromear y relajar el ambiente, ambos estaban un poco dudosos de lo que iban hacer, pero seguros de que no se arrepentirían continuaron explorando el cuerpo del otro, hasta que no quedo nada que les impidiera verse como dios les trajo al mundo.

Se encontraban frente a frente, recostados de lado sobre la cama. Hiccup en su interior buscaba las palabras para pedirle a Jack que continuara, pero no era capaz de mover su boca y Jack...bueno, él estaba en las mismas, de alguna forma desafiando a Hiccup cada vez que tocaba. Temeroso, poniendo atención a cada una de sus reacciones.

- Quieres seguir?- Pregunto al fin el albino, deslizando una de sus manos por la cadera del menor. Hiccup, solo asintió sonrojado.

Torpe y lentamente se movieron hasta acomodarse bien sobre la cama. Las tocaciones se volvieron más íntimas y los sonidos mas eróticos. Juntos estaban explorando un mundo nuevo, algo que solo habían visto en las pornos. Quizás su idea de como seria era la equivocaba, pero aun así llegaron a un resultado exitoso. (muahahah les gusta como censuro el lemon)

Y Así llego la mañana, ambos reian como tontos y se avergonzaban.

Los días pasaban, siempre que se veían intimaban y ya no sentían esa vergüenza de la primera vez, sentían calma y felicidad, pasar tiempo juntos era agradable, demasiado agradable. Ambos sintieron que toda esa felicidad duro muy poco.

El día de la graduación llego, Jack había sido aceptado en la universidad y se mudaría.

Al comienzo se llamaban todos los días, los fines de semana quedaban para verse, pero a Jack se le hizo cada vez mas difícil hacer el viaje para ver a Hiccup. Ambos decidieron que la mejor opción era terminar. Esa distancia solo les estaba dañando.

Terminaron en buenos términos y cosas como esas, pero Hiccup...lo único que supo de Jack luego de eso fue... Al dio siguiente recibió muchas fotografías del albino ya con alguien nuevo. Después de eso no quiso saber mas de él.

//Al fin llegamos a donde quería y donde de verdad empieza la historia para mi//

Esos días...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora