Escarlata | KTH + JJK

DIECIOCHO

La familia Kim nos había invitado a su hogar para preparar los disfraces. Al llegar, después de los saludos cordiales, Taehyung me guió hacia su habitación. Su andar era tan tranquilo como siempre, pero había algo en la forma en que sus dedos rozaron el marco de la puerta al entrar que me hizo pensar que este lugar tenía más significado para él de lo que aparentaba.

Al cruzar la puerta, mis ojos fueron inmediatamente atraídos por las paredes, donde colgaban fotografías de celebraciones pasadas. Cada imagen era una historia de Halloween: los Kim con disfraces perfectamente coordinados y decoraciones que rivalizaban con cualquier festival profesional. Taehyung aparecía en casi todas las fotos, siempre al centro, con esa serenidad magnética que lograba destacar incluso entre el caos.

—¿Comenzamos? —preguntó, sacándome de mi ensimismamiento.

Asentí, dejando mi mochila en la esquina mientras sacaba las prendas que habíamos elegido. Me puse unas Converse y un pulóver sobre la camisa; luego completé el atuendo con el saco del uniforme. Justo cuando terminaba de ajustar los puños, Jungwon irrumpió en la habitación con herramientas de estilismo en las manos.

—Perfecto, déjame ayudarte con el cabello —anunció con una sonrisa traviesa, como si estuviera a punto de obrar una obra maestra.

Se sentó frente a mí y en cuestión de minutos comenzó a moldear rizos sueltos que transformaron mi reflejo en el espejo. Su precisión era impresionante, cada movimiento parecía calculado para lograr el equilibrio perfecto entre naturalidad y estilo. Cuando terminó, aplicó spray negro con tanta destreza que apenas sentí el producto en mi cabello.

—El negro te sienta bien —comentó con una sonrisa satisfecha, y no pude evitar ruborizarme.

Agradecí y cuando Jungwon se marchó para cambiarse, quedamos solos. Taehyung tomó una lata de spray castaño y se giró hacia mí.

—¿Me ayudas?

Tomé el spray, cuidando de aplicar el color con delicadeza en sus mechones oscuros. El castaño se fundía con su cabello como si siempre hubiera estado allí, dándole un aire diferente, casi enigmático. Mientras trabajaba, él ajustaba los detalles de su atuendo con meticulosidad: las vans negras, los nudos de nuestras corbatas, e incluso unas manchas azules que había adherido a su camisa como parte de su ingeniosa representación.

Cuando terminamos, nos paramos frente al espejo. Era imposible no sonreír. Nuestra inspiración en Heartstopper estaba impecable y el nivel de detalle hacía que pareciera que habíamos saltado directamente de las páginas del cómic.

—Estamos listos —dije, tomando el teléfono para capturar el momento.

Tomé varias fotos, asegurándome de incluir nuestros zapatos juntos, un detalle simbólico que Taehyung y yo habíamos planeado. Él observó las imágenes en la pantalla y sonrió, satisfecho.

🍂

El Volvo de Taehyung se estacionó junto a la motocicleta de Chanyeol. A lo lejos, vimos cómo este bajaba de su Audi impecable como siempre, con un traje negro y una corbata perfectamente ajustada. Su aire sofisticado chocaba cómicamente con el espíritu espeluznante de Halloween.

—¿Chanyeol? —pregunté, frunciendo el ceño—. ¿De qué estás disfrazado?

Con una sonrisa ligera, sacó unas gafas negras de su bolsillo, se las puso y bajó la cabeza para mirarnos por encima del marco.

—Hombres de Negro —anunció con solemnidad, sacando un artefacto que imitaba al famoso “neuralizador”. Al apuntarlo hacia nosotros, hizo un falso "clic".

—Lo que estás viendo aquí... nunca pasó —dijo, manteniendo un tono monótono.

Taehyung soltó una carcajada que iluminó el momento y yo me uní entre risas. Incluso Jungwon, vestido como Harry Potter, levantó su varita con teatralidad.

—¡Alohomora! —gritó, como si estuviera abriendo las puertas mágicas hacia el gimnasio decorado para la ocasión.

El Jeep negro de Yoongi llegó justo en ese momento. Bajó con la capucha de su disfraz cubriéndole el rostro y una máscara de Ghostface en la mano. A pesar de su usual aire reservado, había optado por un disfraz icónico que le sentaba sorprendentemente bien.

—¿Así que Ghostface? —pregunté, intentando mantener la conversación casual.

Él levantó la máscara y con la voz baja del personaje respondió: —¿Cuál es tu película de terror favorita?

Aunque trataba de mantenerme serio, no pude evitar reír. —Un clásico, ¿eh?

Yoongi apenas esbozó una sonrisa antes de bajar la máscara nuevamente.

Todos avanzamos hacia el gimnasio, atrayendo miradas y risas. Chanyeol, completamente comprometido con su papel, apuntó su "neuralizador" hacia un grupo de estudiantes, quienes fingieron quedar hipnotizados. Jungwon lanzó un "Wingardium Leviosa", mientras Yoongi avanzaba en silencio, sosteniendo su máscara como si fuera el villano de la noche.

La familia Kim, en su variedad de disfraces y personalidades, había transformado una simple noche de Halloween en su propia tradición. Y aunque nadie lo sabía todavía, aquella noche estaría destinada a marcar un antes y un después.