El regreso De La Bestia (Parte2)

Capitulo 19

Después de disfrutar de su inusual cena, Min-ji se subió a la espalda de Jungkook, riendo mientras él comenzaba a caminar en dirección a casa. La noche había comenzado a aclararse, y el aire fresco les daba una sensación de alivio. Sin embargo, la imagen de Taehyung no salía de la mente de Jungkook. Mientras avanzaban.

Flashback:

Taehyung despertó de repente, sintiéndose mareado en el sofá. Su mente estaba nublada. Se incorporó lentamente, sintiendo que algo no estaba bien. Miró a su alrededor y vio la nota de Jungkook, con su letra clara y decidida: "Te prometo que volveré con Min-ji."

Un pánico recorrió su cuerpo al leer esas palabras. La imagen de Min-ji, su pequeña, lo invadió. ¿Dónde estaban? ¿Por qué tardaban tanto? Se levantó de un salto, buscando su teléfono, pero las dudas lo atormentaban.

Con manos temblorosas, comenzó a llamar a los contactos de emergencia, intentando obtener información sobre el paradero de los militares. "¡¿Alguien sabe algo?! ¡¿Qué está pasando?!", preguntó, su voz llena de ansiedad. Pero cada respuesta que recibía solo aumentaba su desespero.
"Lo sentimos, gobernador, no tenemos información precisa en este momento," le decía cada vez un tono impersonal al otro lado de la línea. La impotencia lo devoraba. "¿Y si algo le ha pasado a Min-ji?" pensó, sintiendo la angustia apoderarse de él.

La espera se volvió interminable. Se sentó en el sofá, la cabeza entre las manos, intentando calmarse.

-Jungkook es fuerte, él siempre encuentra la manera,- se repetía, pero cada segundo que pasaba sin noticias lo llenaba de incertidumbre.

Finalmente, se quedó ahí, esperando y confiando en que Jungkook traería a Min-ji de vuelta, sana y salva.

Fin del Flashback...

Jungkook sintió una punzada de preocupación ,Sabía cuánto significaba Min-ji para Taehyung. Mientras caminaba con ella a cuestas, el ambiente se sentía más relajado, pero en su interior, había un nudo de inquietud.

Cuando finalmente llegaron a casa, la puerta estaba entreabierta. Jungkook sintió un escalofrío recorrer su espalda, recordando el estado de Taehyung. Entraron, y pronto encontraron a Taehyung en la sala, con los ojos vidriosos y la expresión desolada.

-Tae,- llamó Jungkook, la voz temblando de emoción al ver la preocupación.

Taehyung, al oír la voz de Jungkook, se giró rápidamente, y sus ojos se iluminaron al ver a Min-ji, riendo y segura en la espalda de su padre.

-¡Min-ji!- exclamó Taehyung, corriendo hacia ellos con lágrimas en los ojos. Se arrodilló, abrazando a la niña con fuerza, aliviado de verla a salvo. -No sabes cuánto miedo tuve,- murmuró, su voz quebrada mientras la abrazaba.

-Papá y yo comimos un montón de cosas ricas, Papi,- dijo Min-ji, su risa proporcionando un bálsamo a la angustia que había llenado la casa.

-¿Qué pasó? ¿Estás bien?,- preguntó Taehyung, mirando a Jungkook, que aún tenía marcas de la batalla, pero su mirada era firme.

-Estamos bien,- respondió Jungkook, sintiendo el peso de la tensión que se disipaba poco a poco. -Luchamos, pero estamos juntos ahora. Solo necesitábamos un poco de tiempo.

Taehyung se dejó caer en el sofá, con Min-ji todavía en sus brazos, y la escena de preocupación y miedo se convirtió en un momento de alegría. A pesar de las cicatrices de la noche, la unión familiar se había fortalecido.

-Vamos a comer algo de verdad ahora, ¿qué te parece?,- sugirió Jungkook, intentando cambiar el ambiente.

-¡Sí!,-dijo Min-ji emocionada, saltando de los brazos de Taehyung. -Tengo hambre otra vez.