20. The City of Stone (it's cold and lonely)

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Max fue arrestado, inmediatamente sus huellas fueron tomadas, así como fotografías de perfil y de frente, lo trataban como un criminal cualquiera, no se lo merecía, la manera en que los policías lo maltrataban sería un golpe en el alma de aquellos que lo amaran, lastima que estaba completamente solo, abandonado, la decepción sabía amarga en su boca, nunca olvidaría el rostro de Sergio, la amargura que había en él, el hecho de que no movió ni un dedo para ayudarlo a pesar de que él bien sabía que era inocente, nunca se imaginó que lo que en realidad pasaba por la cabeza de Sergio era shock, para Max, simplemente era desinterés, especialmente cuando miró a Charles y en él vio una breve sonrisa asomarse mientras entraba a su auto.

Ya se había cansado de preguntar, gritar, llorar, ya simplemente no existía nada, en su mente las palabras de Lando resonaban fuerte una y otra vez "¿Que es el amor comparado con el estatus social y el poder?" ahora lo había averiguado, ahora que estaba a la deriva, su corazón estaba vacío.

Los ojos de Max que antes eran un azul brillante lleno de vida, ahora se veían grises y muertos, esa chispa que los caracterizaba ya no existía, solo reflejaban una profunda tristeza.

Afuera, con los policías, su abogada exigía frenéticamente hablar con el fiscal, esto sin duda había sido un error, no había una sola prueba en su contra, todos se negaron a hablar con ella, estratégicamente se había planeado que el arresto fuera en viernes, la burocracia la mejor amiga de los ejecutores de este maléfico plan.

La pobre abogada no tenía ninguna oportunidad, el futuro ya estaba decidido, no habría nada que ella podría hacer para revertir esta situación.

Habría un juicio en un mes, se encontraría a Max culpable por unanimidad, incluso había pruebas, circunstanciales por supuesto, que lo ataban al asesinato, pero el caso era débil, así que en unos años sería elegible para apelación, a pesar de esto, cualquier minuto en la cárcel se sentiría eterno, cualquier minuto en prisión, lo cambiaría para siempre.

La detective Olivia se encerró en el baño, mojó su cara con agua fría, sintió tanta frustración, ¿Cómo podían hacerle esto a una persona inocente? Se preguntaba una y otra vez, había fallado en su trabajo, no había sido suficiente. Simplemente son ordenes, le dijeron, todavía no sabía que habían ofrecido para que los verdaderos culpables fueran liberados sin una sola mancha en su historial, maldecía en voz alta, odiaba la corrupción, odiaba el poder que unos cuantos podrían tener.

Pero no se rendiría, haría todo lo posible para ayudar a Max, si no a salir lo antes posible, mínimo a que su estancia en prisión no fuera tan mala y humillante, al menos tendría que intentarlo.


Camino al aeropuerto, Sergio le preguntaba a Jonathan entre lágrimas que estaba pasando

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Camino al aeropuerto, Sergio le preguntaba a Jonathan entre lágrimas que estaba pasando.

-Sergio, necesito que te calmes para que sepas que está pasando, para que lo comprendas. Tu padre tiene que estar presente, cálmate de una vez- Jonathan era firme, pero gentil, entendía por lo que estaba pasando, sabía que lo que hicieron, no había sido ético, sin embargo, ese era su trabajo, arreglar los problemas de gente poderosa.

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