-Buenos Días, traemos el desayuno.
Temprano al día siguiente, Enid golpea la puerta de la cabaña que alquilaron los Addams, quienes medio adormilados abren para que pase la pareja.
-Eres muy, muy fuerte. –Comenta Pericles al ver al lobo dejar un viejo cofre que llevaba cargando con una mano. El peso hizo cimbrar un poco el piso al dejarlo caer.
-Lo normal en mi. – Dice ayudando a Merlina que lleva una pequeña olla de barro con un guiso de liebre que hicieron para compartir con la familia.
Los pelinegros están interesados en el cofre más que en la comida pero como dictan las reglas de etiqueta, primero tienen un breve desayuno seguido de la revelación arqueológica más grande de este siglo.
-¡El diario del Patesi! -Grita Homero sorprendido al leer las primeras hojas del cuaderno.
-Lo supuse. –La morena menea la cabeza. –Estoy muy molesta por haber dejado mis lecciones de lenguas muertas.
-Preferiste las nuevas ciencias, era lógica tú... -El hombre se detiene para volver a leer cierto párrafo. -Por la lluvia de abril... -Mira a Enid y vuelve a leer, comienza a sudar, pasa a la siguiente página. -¡Por las tormentas de mayo! -Mira a Enid, menea la cabeza.- ... Por...
-Explica qué sucede cariño... –Morticia y el resto están que se mueren de la duda.
Homero no quiere hablar, como un loco lee completo el diario y al terminar enciende un puro para calmarse, el olor es tan fuerte que Enid decide esperar afuera. En cuanto sale el hombre habla.
-Si es quien dice ser, tiene más de 150 años... y lo sabías. – Todos se sorprenden menos Merlina.
-Me parece que sí tiene esa edad. – Enid no entiende cómo funcionan las mentiras, duda mucho que haya elaborado un maquiavélico plan para engañarle.
-¿Si es un dios? -Pregunta el menor de la familia.
-Quizá es el hijo de un dios... bueno... –Eso va en contra de todos sus preceptos, pues son gente de ciencia. -Quizá hijo híbrido de una especie animal que aún no hemos descubierto.
-El lobo blanco.
-¿Él te contó su historia?
-Vagamente y lo poco que recuerda.
-Por eso estabas tan interesada en que leyera esto. –El hombre lo entiende. –Tienes instinto, justo aquí está escrita su historia, al menos la versión de su hermanastro. El rey que duró solo 3 meses con la corona. -Señala el cacharro en el cofre.
Homero va relatando las partes importantes de esta historia comenzando con la concepción de Enid y su "verdadero nombre", Orlupo, una abreviación de lobo dorado. Al decir esta palabra se escucha un golpe afuera de la cabaña, el ojiazul entra enojado.
-No me gusta, yo soy Enid.
(*CPB: Te entiendo perfecto, Orlupo suena bien culero.)
-Me disculpo por ser indiscreto. –Homero da una pequeña reverencia. – Patesi Enid.
-Tampoco me gusta Patesi, así llamaban a mi hermano, no a mi.
-Patesi es un honorífico que se colocaba a los príncipes del viejo Reino que existió en esta montaña. -Señala el hombre dándole una calada a su puro.
-No soy eso.
Homero regresa a contar lo que está escrito en el diario del Patesi Jayor Valaky el primogénito del Rey Ordumen Valaky, los dirigentes del Reino Argenta, hombre de un carácter serio, poco afectivo y siempre nervioso. Los Reinos cercanos tenían deudas vencidas con Argenta por lo cual prefirieron declarar la guerra antes de pagar lo que debían.
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El Dios de la Montaña.
General FictionCuenta la leyenda que hace mucho tiempo en las Montañas, Ríos, Cuevas y Riscos habitaban seres sobrenaturales, cambiaformas. Se creía que esos seres eran animales de gran tamaño con la capacidad de hablar, que cobraban "ofrendas" a los humanos que s...