PD: Nos vemos pronto

Capítulo 3: Ella.

Alex(P.O.V)
Me levanté pronto, a las 4:00 para ser exactos, tenia que ir al aeropuerto y coger un avión a Madrid, luego otro hacia Dublin, estaba ansioso por saber que me había deparado el destino en Irlanda. Me vestí con una camiseta, unas bermudas y mis antiguas zapatillas de golf. Desayuné y me dirigí al aeropuerto, iba a echar de menos a mi querida y amada Barcelona, pero quería conocer Dublín, durante dos semanas iba a estar en un internado con algunos chicos más, iba a practicar mi deporte favorito, el golf, e iba a aprender inglés y quien sabe, tal vez conocer a alguna chica, pero lo que más quería era pasarmelo bien. Llegué al aeropuerto a las 6:00 para coger el avión de madrid hacia las 11:00, en el aeropuerto me encuentro con la monitora de la compañía que me acompañará hasta el campamento, se llama Elvira, es muy maja, es morena, alta y tiene los ojos marrones.
-Hola Alex, soy Elvira, te acompañaré en todo momento, vamos a facturar.- me dice.
Obedezco y juntos facturamos mi maleta y mis palos de golf, entonces llega la hora de las despedidas.
-Deu, mamá, deu papá.- me despido.
-Deu Alex.
Me alejo junto con Elvira hacia el control, lo pasamos los dos y esperamos, a las 10:30 esperamos hasta poder embarcar, disfruto del vuelo, llegamos a Madrid a las 14:00, a las 14:30 veo a los madrileños con los que compartiré el campamento, me hago amigo de un tal Álvaro, su hermana Noelia y de un chico que se llama Dani, embarcamos a las 17:30 y llegamos a Dublín a las 20:00, en el vuelo conozco más a mis nuevos amigos, Noelia y Álvaro son de Madrid, para ser exactos San Sebastián de los Reyes. Dani, en canbio, es de Cantabria, Santander, también juega al golf y se ha apuntado a eso en el campamento. Cogemos las maletas y nos dirigimos hacia el castillo, contemplo el paisaje durante 45 minutos. Cuando llegamos contemplo el castillo, es gris y es enorme, muy irlandés. Vamos al assembly hall y ahí damos nuestro pasaporte, tarjetas sanitarias y dinero, lo guardan todo cuidadosamente para no perderlo. Guardan mis palos junto con los de Dani, en una habitación en el assembly hall, más tarde nos dirigimos hacia las habitaciones, llegamos y veo quien es mi compañero de cuarto en la etiqueta que hay en mi puerta, se llama Simón y parece que se ha elegido la litera de abajo. Deshago la maleta lo más rápido que puedo y bajo de nuevo a la sala donde hemos entrado por primera vez, esperamos todos hasta que terminen de bajar el resto de compañeros y nos llevan al gimnasio, están a punto de acabar las actividades de la noche, veo como a lo lejos un grupo de personas intentando pasar un aro por dentro sin soltar sus manos, veo como intentan saltar varios metros haciendo el tonto, veo como otros van a ciegss intentando dar a sus contrincantes. Una chica morena, más alta que yo, de ojos verdes y gafas wifarer rosas fucsia se acerca hacia nosotros.
-Hola, ¿sois españoles?- pregunta, tiene una voz bastante bonita.
-Sí, yo soy Noelia.
- Yo soy Alex.- digo, la chica se gira y veo que es bastante mona, es muy sonriente.
-Por fin, llevo todo el día esperando a los españoles.- comenta.- por cierto, me llamo Bea.
Noelia y ella hablan animadamente, yo me hago amigo de una chica llamada Marta, me empieza a gustar un poco, es rubia y tiene unos ojos ambar preciosos, también me hago amigo de la prima de Bea, María, se parece muchisimo a Bea cuando lleva las gafas, si se las quitan no son nada iguales. Tomamos las típicas biscuits and milk irlandesas.
-Es leche y galletas, no galletas y agua.- dice enfadada Bea.
- Discrepo, son galletas caseras con leche calentita, no galletas de paquete con agua.- grita indignada María.
Nos tomamos las galletas tranquilos, intercambiamos lugares de origen, cursos a los que vamos a pasar, nombres, equipos de fútbol... Al final creamos un grupo los tíos, somos Álvaro, Miguel, Adrián, Dani y yo. Nos llevamos todos genial, subimos a las habitaciones deseando buenas noches a las chicas, me acuesto pensando en ella, la chica rubia y de ojos ámbar, Marta, pero también pienso en la chica de ojos verdes y gafas, Bea, duermo feliz y descanso, un principio genial para un viaje inolvidable.