N.A: Hola! Este era un OS que estaba en el libro de parejas, pensé que era mejor que estuvieran en el libro especifico, por lo que si se me ocurre alguna idea con las parejas ya hechas van a estar aquí también, intercalando con los oc. Las leo en comentarios, saludos!
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Una vieja profecía, una vieja hermandad unida por la prosperidad de la vid, con ideologías y métodos especiales, que el mundo creía perdido, se haya escondido en lo más profundo del pueblo de Cabo Esperanza, un pequeño lugar gobernada por las mismas personas, por las mismas familias desde la fundación del mismo.
No había escapatoria, no había modo de salir, quien entraba en Cabo Esperanza debía quedarse allí para siempre, a menos claro que fueras desterrados por los poderosos, eso rara vez sucedía.
Pero la cuenta regresiva para los eventos que tenía que acontecer en el pueblo estaba llegando a su fin, si no alimentaban la vid con sangre del elegido todo el pueblo caería en una eterna maldición, las escrituras habían hablado, pero no toda la hermandad estaba de acuerdo con quien había resultado elegida, Paige McCullers, una de las descendientes de los herederos del pueblo.
Las votaciones habían sido hechas, con casi una nimiedad se había decidido el final de la joven, quien estaba por casarse con una forastera de la gran ciudad, Emily, estaba a punto de llegar al pueblo para reunirse con su prometida, habían decidido llevar a cabo la celebración en su pueblo, tal como lo dictaba la tradición familiar y no había nada que Em no hiciera por su mujer.
Estaba llegando tarde al pueblo debido a su trabajo en la ciudad, faltaban pocas horas para casarse por lo que ya estaba vestida para la celebración cuando en la ruta se encontró con una chica que estaba haciendo auto stop, decidió parar para preguntar si podía ayudar.
- Hola, ¿hasta dónde vas?
- Hola, voy a Cabo Esperanza – sonrió - ¿podrías alcanzarme?
- Claro, sube – la joven dejo su bolso detrás y subió de acompañante – estoy yendo hacía allí
- Vaya, alguien está yendo al pueblo por decisión propia – la miró – eso me sorprende, soy Alison DiLaurentis
- Emily Fields – estrecho su mano - ¿tiene algo malo el pueblo?
- Siempre fue un lugar del que, aunque quieras no puedes irte – se encogió de hombros – como si alguna fuerza te mantuviera allí sin escapatoria
- Entonces ¿Por qué estás yendo allí?
- Porque es lo único que conozco, siempre fue mi hogar hasta que prácticamente me echaron de allí – negó – eso no importa realmente
- Vaya, bueno espero que sea un buen fin de semana – la miró – voy al pueblo a casarme con mi prometida, vamos a respetar las tradiciones familiares
- ¿Quién es tu prometida? – estaba sorprendida por lo que estaba contándole
- Paige McCullers – la joven que estaba a su lado acompañándola hizo una mueca - ¿la conoces?
- Todo el mundo allí conoce a las familias fundadoras – se encogió de hombros – así que sí, Paige es una gran chica
Continuaron el camino hacia el pueblo hasta que Alison le indicó que podía dejarla allí en esa casa al parecer abandonada a medio camino entre el pueblo y las afueras de este. Al bajar se despidió tomando su bolso y deseándole suerte con su boda, si iban a festejar allí tendría que tener toda la suerte del universo, pero claro que no iba a decírselo.
La suerte estaba echada y la hermandad tenía los minutos contados antes de que la maldición se desatara, dejaron que la pareja de futuras esposas disfrutara del pueblo un momento, que fuera feliz con toda la gente que estaba dispuesta a disfrutar por un segundo la fiesta. Hasta que la suerte se acabó, Emily estaba buscando a su recién convertida en esposa por toda la estancia familiar donde se habían casado, preguntó a todos los invitados, pero nadie la había visto, se acercó al hermano de su esposa, Ethan, para comentarle que estaba buscándola desde hace un tiempo y no podía encontrarla.
