Ellos

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Durante unos meses le he estado dando vuelta a las cosas mas de lo debido. Todo a mi alrededor me abruma demaciado.
Gracias a Dios Daniel me mantiene ocupada casi todo el dia, y ahora que empeze a dar lecciones en la academia mi mente termina debastada por las noches. Demaciado cansada como para pensar en toda esta mierda.
Desde que le conte a Edward sobre mi encuentro con Jamie la relacion con mi marido esta afectada. Casi no lo veo, y cuando lo hago el no tiene tema de conversacion conmigo. Me evita y me da la espalda casi, casi todas las noches.
Hoy me he decidido a enfrentar a Jamie por telefono. Decirle que todo su drama estaba fuera de lugar. No soporto que Ed, este tan distante. Simplemente me agobia demaciado la idea de perderlo. No imagino una vida sin el, la idea de despertar y que el no este a mi lado es inquietante. El no es asi, es la dulzura personificada y su frialdad me hiela asta la medula de los huesos.
Porque rayos le afecto tanto lo de Jamie. Maldita sea, quizas el sabe lo mismo que yo me niego a aceptar.
Vale, jamas a sido un secreto que le quize muchisimo a Jamie. Pero ahora estoy con el aunque muy en el fondo, en un lugar obscuro y demacrado de mi ser Jamie vive desde hace ya varios años. Y al igual que mi padre, no puedo desprenderme de ellos.

-Llege, quien esta en casa?- su dulce voz me saca de mis pensamientos, y me hace reaccionar corriendo hacia el horno donde he dejado la pasta que cenaremos hoy.
- Ed, amor estoy aqui. Luchando por no incendiar el lugar...!!- le anuncio que no esta solo. Diablos la felicidad por saberle en casa se manifiesta en mi voz.
El no contesta, algo que hace que la sonrisista se borre de mi rostro. Solo escucho sus botas dirijirse hacia mi.
-Huele bien, y donde esta Daniel?- es demaciado cortante, un nudo en mi garganta impide pasar saliba, esto es demaciado doloroso.
Sigo incada mirando el horno, se que esta recargado en la barra de servicio.
Intento con todas mis fuerzas por no llorar. Me limito a darle la mas dulce de mis sonrisas. Esas que son solo para el.
- Gracias, espero te guste. Me he venido corriendo de la academia- Dios Mio, esta guapisimo sus ojos verdes estan serenos y tiernos. Sus rizos estan mojados señal de que afuera llueve, y sus jeans ajustados y su camiseta negra le sientan de maravilla. Que afortunada soy. Me desarma lo amo a el y solo a el.- Mi madre paso a recojerlo, lo traera por la noche.
Se moja los labios con su lengua. Le pido a Dios que mantenga mi boca cerrada.
Edward es demaciado guapo.
-Hey, acercate y haznos un favor, cierra tu boquita. Creo que puedo ver la profundidad de tu garganta amor.- su voz es tan sexi. Se acerca a mi y con su dedo indice cierra de un solo golpe mi boca, sin dejarme de mirar.
-Ammm yo heee... Edward lo siento. Debi decirte todo lo de Jamie desde que paso.- es dificil formular una frase razonable con el ami lado.
La sangre hierve dentro de mi y recorre rapidamente todo mi cuerpo una y otra vez. Siento que mis oidos van a explotar!
El se acerca mas y mas y sin darme tiempo de nada, me carga y mis piernas se entrelazan sobre su cintura. Creo que voy a morir de pasion.
Rapidamente recorre mi cuello con sus cuatro dedos. Marcando un camino desde mi nariz a el comienzo de mis pechos. Mi respiracion es acelerada.
El sonrie discretamente, sabe el efecto que tiene sobre mi. Dios podria perderme en sus brazos, en su sonrisa deslumbrante y en esos ojos verdes llenos de ternura.
- Asi que lo sientes, mmmm sabes lo sexi que se ve tu trasero en ese vestido. Quizas tengo que recordarte que ese traserito es mio solo mio.- su amenazante voz me deja aturdida pero pierdo la nocion timpo-espacio con tan solo ver como se pasa la lengua por su labio inferior.
- Daniel tardara unas horas mas en llegar, y yo te voy hacer el amor aqui, en la mesa de la cosina, asi que necesito que estes quieta!- su hipnotizante voz me aturde.
Me recuesta dulcemente sobre el azulejo frio de la barra de servicio, su ojos verdes no dejan de mirarme, y asi con tanta fasilidad me desabrocha los botones de mi entallado vestido azulmenta.
Dejando al descubierto unas bragitas de encaje negro y un sujetador a juego. Lo admito lo use pensando que talvez tendria suerte con mi marido esta noche.
Tan solo pensar en que mis sueños eroticos se hacen realidad me hace sonreir, Edward frunce el seño ante mi sorisa pero se limita a morder despacio mi labio mientras cada milimetro de mi piel le da la bienvenida a el aroma del cuerpo de mi esposo.

Daniel y Edward duermen placidamente en el sofa, ellos son mi total existencia. Hoy ha sido un dia maravilloso, Edward y yo estamos mejor que nunca y bueno Daniel nos ha hecho reir asta que no pudimos mas. Verlos tan unidos y sentirlos tan mios me hace sentir un nudo en la garganta.
Decido irme a nuestra habitacion, no quiero molestarles con mi ruido. Quiero que sigan dormidos. Camino de puntitas en direccion a mi habitacion. Me siento sobre nuestra cama y abrazo torpemente la almohada de mi marido. Su aroma penetrado en su almohada me hace viajar tiempo atras y recordar la primer vez que hicimos el amor en esa expocicion de sus obras.

"Tu eres mi papi?...
NO...
A donde vamos, extraño a mi mami?...
Al hospital...
Para que?...
Callate de un puta vez, Taylor. Mas aprisa me esta matando estar tan serca de ella...
Señor, tan solo es una niña!
Lo se, lo se. Como he sido tan estupido. No quiero que Anastacia se entere de nada. ENTENDIDO!
Si señor.

Señor Grey, efectivamente la puebra es 99.99% positiva. La niña es su hija.
Maldita sea!! Ok muchas gracias, enseguida salgo.
EVE, no me volveras a ver mas. Entendido. Te dare todo lo que necesites y sueñes pero jamas puedes pedir verme de nuevo. Ok?
Si, señor!
Pffff, dejame limpiarte esas lagrimas. Dios, eres tan parecida a ella. Su misma piel blanca, esos ojos identicos a los de ella. Eres tan parecida a mi. Somos iguales.
Si señor!
Si señor? Si por que? No seas torpe Eve.
Si, somos iguales"

Maldita sea, despierto sobresaltada y con sudor en mi frente. Mi respiracion es agitada. Fue tan tan real, mis mejillas arden en el mismo sitio como aquella vez cuando paso su dedo indice para limpiar mis lagrimas puedo aun poder oler el aroma a gel antibacterial del hospital. Su dominantes ojos grises me tienen atrapada.
Sento una necesidad desmedida de ver a Jamie.
Esta mal muy mal lo se. Pero solo el logra que olvide a este hombre, a mi padre al Sr. Grey.
Me dirio corriendo al baño y rapidamente me doy una ducha con la esperanza de que el agua se lleve estas ideas destructivas.
Al salir rapidamente me pongo unos jeans, camiseta, y mis botas preferidas. Repidamente me hago una trensita, tomo bolso y celular al estar en la sala.
La cabeza me da mil vueltas. Sin darme cuenta de donde estoy alzo la mira y me encuento con Edward en el corredor. Esta parado y cruzado de brazos con una expresion muy seria sobre su delicado rostro.
Mierda, mierda!!!!
- Te puedo preguntar a donde vaz? Porque te escabulles como una ladrona por tu propia casa.- su voz es seria pero se que esta furioso.
- Ammm a ni.. Ningun lado. Este mmm tenia que tomar aire.- diablos estoy muy nerviosa. Apenas puedo verle al rostro.
- Aire? Demonios Eve piensas que soy idiota. Quieres largarte al lado de el. Necesitas tanto de Jamie? Maldita sea yo soy tu esposo.- maldicion esta hecho una furia. Su exprecion coorporal a cambiado.
Me odio por esto. Pero de verdad necesito a Jamie. Ese cabron esta igual de Jodido que yo. Edward es tan puro tan bueno. No quiero ni pensar en contaminarlo con toda esta mierda.
-Ed, cariño. No quiero y no puedo contaminarte con toda esta mierda. El esta tan sucio como yo. Es por eso que solo el me puede ayudar!- mis lagrimas empiezan a caer sobre mis mejillas. Me voz esta tan debil que apenas es un susurro. Estoy tan avergonzada.
- A donde ivas? Y porque?- hace caso omiso de mis lagrimas. Sigue frio como el hielo.
-Con Jamie, porque queria hablarle de mis pesadillas. Tenia que hablarle de Grey.- ya esta mis boca escupe esa vergonzosa verdad.
- Voy contigo. Prepara a Daniel. Te espero dentro de 15 minutos en el coche. Y porfavor deja de llorar!- esta tan serio. Es frio y seco su tono. Me intimida, es la segunda persona que me pide que pare de llorar en ese tono. Se me congela la sangre.
-Si señor- mi respuesta involuntaria ante su actitud. Lo deja helado y a mi mas.
Como pude contestarle asi. Sus ojos se suavizan y camina hacia mi abrazandome.
Respiro su aroma y regreso a ser la persona calmada de esta tarde.
-Edward, perdon- muero de verguenza de saber que lo he llamado Señor.
-Chis, no te disculpes. Nena yo no soy tu amo soy tu esposo es diferente. Odio que vulvas a revivir ese pasado espantoso. Y odio saber que piensas que el unico que puede ayudarte es Jamie. Pero odio muchisimo mas que te sientas tan jodida por dentro.- sus palabras inundan mis oidos.- soy tu esposo y en las buenas y las malas. Recuerdalo. Ahora si quieres saber que mierdas paso con Grey, yo pudo ayudarte.- su voz derrama comprencion.
-Si, esta bien- nos besamos y mientras estoy abrazada de el no puedo parar de pensar en Jamie.

Alot of ShadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora