Sonrisas

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Me siento como una completa IDIOTA. Y el detalle aqui es que no solo me lo compruebo a mi misma, sino que a todos los presentes.
Justo cuando el chico que se acaba de presentar deja de hablar, mi semblante cambia por completo. Le miro con los ojos tan abiertos que logro sentir una pequeña punzada en las cienes, y casi puedo jurar que mi boca esta mas abierta de lo necesario.
Es que esa sonrisa y ese mirar me han cautivado para ser precisos. Dios, deberia de pagar impuestos por ser tan atractivo y tan guapo. He conosido tipos lindos pero el tal Jamie se pasa de la raya.
Maldita sea, EL se ha dado cuenta del efecto que acaba de producir en mi, claro es obvio que no soy a la unica que ha deslumbrado de tal manera, no puedo serlo.
Y se que lo noto pues detras de su exprecion fuerte, y detras de ese traje perfectamente a juego con su muy despampanante belleza, puedo casi jurar que mi reaccion le causo gracia.
Claro trata de ocultar una sonrisa pero estamos deacuerdo que a fallado por completo.
Al darme cuenta de su divertida expresion, como es costumbre mis malditas mejillas me delatan poniendose tan rojas, que el calor que han producido me deja un poco acalorada.
- Vamos Eve, di algo por Dios pareces una completa idiota. Disculpala Jamie, aveces puede ser un poco grosera.- la idiota de Abi le dice al chico, mientras las tipas que les acompañan asienten con risitas silenciosas.
- Perdona, Jamie?? Un placer chicos y si me disculpan necesito salir. Disfruten la fiesta.- me limito a contestar y salgo corriendo de ahi.

El patio tracero de la casa de mis abuelos es simplemente hermoso. Aunque no tiene nada extraordinario mas que un pequeño columpio y una banquita la cual me habia hecho compañia durante años en estas pateticas reuniones. Ella, un té, un buen libro y mi solitaria presencia lograban hacer un efecto grandioso.
Me limito a observar el pequeño paisaje mientras dejo que la brisa nocturna seque mis lagrimas, las cuales han salido traicioneras como siempre, a causa del horrible comentario de mal gusto por parte de mi prima. En fin no se porque darle tanta vuelta al asunto, asi que doy la vuelta decidida a tomar una taza de té caliente he irme a perder en la banca.
Pero he olvidado un pequeño detalle... La ventana. Maldicion ahora si que me he dado duro en la cabeza. Me inclino para no perder el equilibrio, dado que por el fuerte golpe he sentido algo de mareo cuando siento unas manos frias como el marmol tocar mi mejilla.
- Maldicion, crei que la finta de torpe era eso, solo la finta. Pero me doy cuenta que eres muy torpe Eve?? Verdad asi as dicho que te llamas.- sin levantar la cabeza (accion producida por mi reciente golpe) logro escuchar ESA voz.
Levanto el rostro, apenadisima y otra vez demaciado acalorada. No puedo creer que se diera cuenta de que mis pies me odian.
- Mmmmm, gracias. Si soy Eve.- respondo tratando de no llorar con todas mis fuerzas
- Señorita Eve saben sus familiares que la torpesa de pies, la cual es evidente, la hace lucir como una completa tonta.- me contesta con un tono muy sinico pero seco.
Maldita sea, EL, su belleza y obviamente su logica evidente (dado mi pequeño accidente) me hacen sentir una profunda pena.
- Sr. Jamie, lo que me ha pasado es asunto mio. Dado que no me hubiese pasado de no ser porque mi querida familiar me humillo frente a un grupo de tipos egolatras. Yo creeo que no, no Sr no les importa mi torpeza.- le contesto muy seria y demaciado triste, me sorprende que le contestara asi.

Nos miramos un momento. Es una mezcla muy confuza de sentimientos.
Odio, burla, sarcasmo, alegria, seduccion. Un millon de sentimientos en una mirada.
Nos limitamos ha mirarnos, ninguno habla pareciera que ambos tratamos de desifrar lo que nuestros ojos miran. Una tarea dificil dado a que yo no sedere a bajar la mirada, y dado que el mucho menos.
- Jamie nos vamos, la fiesta se torna aburrida hemos decidido ir por unos trajos. Te esperamos en el coche.- una de las acompañantes de ellos viene a buacarle y le anuncia.
El se limita a volerse y decirle un simple... - Claro, ahora les alcanzo-
- Srta. Eve usted logro sacarle lo cotidiano a esta reunion familiar para tornarlo un momento demaciado extraordinario. Un placer espero volverle a ver.- me sonrie mientras besa mi torpe mano en señal de despedida.
Y simplemente le observo alejarse entre mis familiares.

Alot of ShadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora