—¿Somos inmortales?
Harry intenta sonreír ante aquello haciendo que Louis se sienta avergonzado inmediatamente.
—No, no lo creo...
—Mejor —Louis continua, abrazando la suave almohada entre sus brazos. Casi era su época favorita del año, cuando el frío se se marchaba, por las noches aún era reconfortante arroparse hasta volverse pequeñito y durante el día el perfume de las floreces abriéndose—. No soportaría ser de esta manera por toda la eternidad.
—No es tan malo como piensas.
—Sí, solo tendré que vivir por el resto de mi vida con el miedo de no hacer que todo acabe el llamas.
—Cuando no me controlaba muchas personas llegaron a atravesarme y estaban convencidas de que yo era un fantasma. Pero todo eso pasa, creéme. Con el tiempo te acostumbras a ellos, cuando tu mente está tranquila ya puedes hacer lo que quieras.
—Es muy fácil estar tranquilo aquí. Este lugar es como el de una estrella de Hollywood.
—Es fácil conseguir dinero cuando sabes lo que las personas piensan, o cuando no te ven, o cuando puedes entrar a todas partes...
—¿Robáis? —Louis vociferó sin poder creerlo.
—Solo a las personas que consideramos oportunas.
—No sois... superhéroes, entonces.
Harry se encoge de hombros.
—Supongo que tienes una idea diferente de lo que ser un héroe significa.
Por supuesto.
—Y... ¿qué pasa si... si decido tener hijos? ¿Ellos serían como yo?
—¿Quieres tener hijos?
Louis es pequeño y vulnerable ante el asunto.
—Algún día... eh, supongo.
—No creo que sea hereditario. Liam y Niall dicen que sus padres no tenían poderes —contesta y después de un rato observa la manera en la que Louis está totalmente estirado en el canapé—. Veo que te ha gustado esta sala de estar.
—Es cómodo, sí. ¿Esa chimenea? Fantástica.
—Me alegro. ¿Tienes sueño? —Louis asiente, queriendo bostezar—. Vamos, entonces.
—¿Estás preparado para otro millón de preguntas?
—Nací preparado.
La risa de Louis se convierte en un eco por las escaleras. Todas las luces se apagan tras ellos hasta cruzar la puerta de la habitación de Harry. Él la observa por segunda vez, abrumado por todo lo que hay dentro. ¿Él podría conseguir una casa así con su poder? Harry ha desparecido y aparecido de nuevo con ropa holgada en sus manos y Louis sigue admirando todo el espacio.
—Adoro ese globo terráqueo. Yo tengo uno, pero no funciona, ya no se enciende —lo hace girar. Harry camina hasta él, viendo de cerca su índice rozar la superficie iluminada de la esfera y cuando está a punto de pararse, hace que gire de nuevo—. A ver adónde nos lleva esto... —deja escapar un sonido de sorpresa cuando se detiene—. ¿Barbados? Eso debe de ser un paraíso.
—¿Te gustan los lugares cálidos?
—Me gusta el sol. Bastante. Me gusta la playa y la arena, las olas y los atardeceres... No me importaría perderme en lugar como ese.
En otro momento quizás él no hubiera recitado todo aquello en voz alta sin sentirse ridículo. Pero ahora todo es sorprendentemente cómodo. La cama era muy cómoda, también. Suave y limpia como la ropa que usaba, Louis no tendría ningún problema en quedarse en esas sábanas blancas para siempre.
—¿Alguna vez te has sentido como si fueras un monstruo?
Él guarda silencio, y pronto afirma:
—Tú no eres un monstruo.
Louis ignora el hecho que Harry sepa exactamente lo que piensa.
—¿Y si lo soy?
—Creo que los monstruos no se hacen ese tipo de preguntas. Ellos pierden la cabeza y—
—Yo hago cosas terribles cuando pierdo el control —murmura.
—Sabes que no tienes la culpa de las cosas que han pasado, ¿verdad?
Louis se detiene, soltando aire.
—Buenas noches, Harry.
Él sonríe. —Buenas noches.
—Gracias por dejar que me quede... y por estar esta noche. Creo que necesitaba un amigo.
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𝐖𝐞'𝐫𝐞 𝐧𝐨𝐭 𝐦𝐚𝐫𝐯𝐞𝐥 𝐬𝐮𝐩𝐞𝐫𝐡𝐞𝐫𝐨𝐞𝐬 [ 𝐋.𝐒 ]
AksiyonLouis descubre que no es como los demás a los trece años. O donde Louis brilla.