¿Primos? | disponible hasta 31/dic/2024

⚬Capítulo : 5

POV :  Adam

Después de casi intoxicarme con los camarones hechos por mi tía fingida y subir a mi habitación temporera, decido enviarle un mensaje a Dylan.

       Yo :
"Gracias a ti, comí unos NO tan apetitoso camarones. Sabes que no mezclo con los mariscos."

       Dylan :
"Ops, que tristeza. Te tengo que dejar, estoy en una de las playas más hermosas con mi novia Megan, suerte. ;)"

       Yo :
"Que pena que tu primita está haya afuera solita, ah espera, esta en la puerta llamándome, adiós!;p"

       Dylan :
"Te matare a sangre fría, Adam Miller."

POV : Valentina {minutos antes}

Subo a mi habitación después de lavar los platos, me doy una ducha y me coloco un camisón viejo de papá. Me acuesto en la cama y decido enviarle un mensaje a Miranda

       Yo :
"Miranda, estuvo muy raro Dylan. Mamá le a cocinado unas camarones como les encanta y puedo jurar que cuando los vio se puso hasta pálido."

       Miranda :
"Vale, tal vez no le gustan los camarones o solo tiene un trauma."

       Yo :
"El único trauma que puede tener es que una vez se comió casi una docena de camarones crudos. Son sus favoritos."

       Miranda :
"Pues ve donde él y hablen de cosas de su infancia, yo mientras voy a ver The Note Book, que le a visto 163916392 veces y siempre lloro, suerte!:* "

       Yo:
  "Bueno, claro, gracias."

Dejo mi celular cargando y me paro de mi cama. Me puse mis pantuflas fieles, salgo de mi habitación en dirección a la habitación de Dylan. Ya al frente de la puerta, pienso dos veces si en tocar o no, cojo una bocada de aire y toco.

–¿Quién?– pregunta Dylan tras la puerta.

–Soy yo, Valentina ¿puedo pasar?– pregunto tímida y un tanto nerviosa.

–Claro.– dice y entro.

Veo que él está tirado en su cama con sus manos detrás de su cabeza y viendo un partido. Me dirijo hacia su cama y me siento en una esquina de ella.

–Si supieras.– sonrío recordando –Te extrañe mucho.– coloco un mechón de mi cabello detrás de mi oreja que antes me estorbaba en mi rostro.

El estaba entretenido en el partido, me mira y se queda paralizado.

–¿Me puedo acostar?– rompo el hilo, sinceramente esto es muy incomodo, con el viejo Dylan me sentía más libre, menos tenso el ambiente, no entiendo nada.

El no habla pero más sin embargo se hace a un lado. Yo, tomando eso como un si, le recuesto a su lado y me aferro a su pecho.

–¿Recuerdas, cuando éramos pequeños, nos trepábamos en el árbol porque te creías Súper Man y te ponía tus calzones encima de tus pantalones?– río mientras recuerdo eso.

–Si, esos viejos tiempos.– contesta Dylan en un suspiro muy profundo.

Nos quedamos en silencio  fueron segundos no más, pero para mi fueron mucho mas largos de lo normal.

–Tal vez me tengo que ir, tienes que estar cansado por el viaje.– tengo intenciones de pararme e irme pero su mano en vientre me detiene

–Quédate.– esas palabras me rebotaron en mis oídos. Sonrío en mis adentros y no se por qué.

–Lo haré.– de nuevo me acuesto a su lado y el me arropa con las sabanas.

–Descansa Vale.– dice y besa mi cabeza tiernamente. Suspiro.

–Descansa, primo.
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Hola hola!!!
Aquí el capítulo 5, espero se le gusten y voten!