• Capitulo : 8

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POV : ADAM

Después de esa no tan linda discusión con mi "prima" Valentina, me voy a la casa. Sin hablarle a nadie me dirijo a lo que se supone que es mi habitación. Soy un idiota, casi meto la pata, soy el peor falso primo de todo el mundo. ¿Eso existe? Bueno, que importa.

Se me esta haciendo muy difícil controlarme, ella es diferente, ni haciendo lo imposible nunca la tendré, tal vez por eso ella me tienta, nunca la tendré.

Y no se porque ese pensamiento se queda en mi mente.

Me dirijo a el baño y me hecho agua en mi rostro. Pienso en que tengo que hacer, nunca he tenido una hermana o algún familiar, y no se que hacer cuando hay una discusión y no suelo pelear con Dylan.

Salgo de el baño, me dirijo a mi cama, y le doy un golpe de frustración.

Soy un completo idiota.

Cuando la culpa no puede joderme más la vida, decido ir a la habitación de Valentina a disculparme, porque supongo que eso hacen las personas normales.

Pero no esta.

Eran las 1:00am y no esta en su habitación.

Donde coños estará con una boracha a las 1:00am.

¿Y si se tomó muy enserio lo de hacer lo que ella quiera?

Dylan me matara, si que lo hará.

Día siguiente...

Después de lo de anoche, no puedo evitar sentirme muy preocupado por Valentina, tanto que eso todavía me preocupa más. No tener señales de ella me está matando.

–Buenos días.– saludo.

–Sobrino, como te fue anoche? ¿Saliste a dar una vuelta?– me pregunta muy animado mi "tío" Robert.

–Me fue bastante bien.– omito los detalles tales como que su hija estaba en un club de mayores. 

–Me alegro por ti, Dyl.– me dice mi "tía" Karen –Aquí tienes.– me entrega un delicioso y muy apetitoso desayuno –Para mi sobrino favorito.– besa mi cabeza y no puedo evitar sentir ternura al respecto.

–Gracias, tía.– se lo agradezco.

–Bueno, familia.– llama nuestra atención el tío Robert –Me voy a trabajar.– dice y observo cómo se despide de Karen con un tierno beso.

–Y yo tengo que hacer unas compras, me gustaría cambiar un poco la sala.– continúa Karen tomando su bolso rojo y caminando junto a su esposo hasta la salida.

Cuando por fin la casa esta sola para mi, decido esperar Valentina viendo un poco de televisor.

Después de estar viendo documentales, la puerta de la entrada se habré.

–Valentina.– afirmo al ver una Valentina con su cabello húmedo y recogido. Tiene un suéter largo, crema y un poco trasparente. También tiene un café en su mano y luce muy cansada.

Ella solo me ignora y sigue su camino.

–Valentina te estoy hablando.– me paro del sofá y le sigo.

–¿Que quieres?– trata de gritar pero se toma la cabeza con torpeza.

–¿Donde pasaste la noche?– soy directo. 

–No se.– se hace la tonta –No recuerdo nada, y tampoco recuerdo que me dijeras "es mi vida, soy mayor, blablabla"– dice imitando mi voz grave pero es un fracaso. 

–Pero tu no eres mayor y yo como tu primo, soy responsable de ti.– la señalo autoritario y veo como rueda sus lindos ojos.

–Joder, que en un mes cumplo dieciocho.– se queja con todo de protesta. 

–Pero todavía no los tienes, por lo tanto soy mayor que tú.– recalco, por extraño que suene, me gusta como arruga su nariz cuando se cabrea.

–¡Por meses! Por estúpidos meses.

Lo que ella no sabe que es verdad que soy mayor que ella y no por meses.

Ella se voltea rápidamente para seguir su camino pero la persigo

–Déjame en paz, enserio.– se queja alejándose de mi.

–No.– la agarro por su mano –Te quiero pedir disculpas, prima.– le digo sincero y ella me mira.

–Ya me quedo claro que soy una molestia.– suelta, recostándose en la ventana.

–No, no es así, solo me dio coraje que por la noche, no siendo mayor de edad, entrase a un club, de mayores de edad, donde hay hombres borachos dispuesto a cualquier cosa por una chica así de guapa y súmale ese traje tan pegado, solo eso.– no miento, en lo absoluto.

–Me dijisteis que ibas con un viejo amigo.– dice y realmente me sorprendo porque parece que esa tonta mentira la ofendiera -Por eso te perseguí.

–Claro que no iba a decirte que me iba con una chica.– me excuso –Y además no me tenías que perseguir.

Ella hace de su labio una línea y baja su mirada.

–Vamos, pequeña Vale.- me aproxime hacia ella –Perdóname.– insisto y hago un puchero provocando que ella día levemente  –¿Si?

–Eres un tonto.– dice ella empujándole fuera de su lado pero lo que provocó fue que me acercara más

Delicadamente le alzó su rostro y me mira.

–Eres hermosa.– me sincero inconscientemente provocando que se sonrojara levemente y estalló en una carcajada.

–Y tú un tonto primo.– me empuja ñero pongo mis manos a cada lado de su cabeza.

–¿Ahora si me dirás donde pasaste la noche?– le pregunte en susurro. Quiero saber, muero de la curiosidad.

–No.– niega y sale de mis brazos –Te dejare con la duda porque bien merecido la tienes.

–De ninguna manera, tú vienes para acá.– la halo por el brazo –Me vas a decir o tendré que usar medidas drásticas- le advierto en tono juguetón.

–¿Y tú que harás, primo?– me reta arqueando una ceja y sonriendo.

–Esto.– le empiezo a hacerle cosquillas por su estómago.

–No. No. No. Basta, basta.– suelta rápido entre carcajadas.

–¡Eres una traidora hija de tu bella madre y rico padre!–  se escucha desde lejos y eso provoca detenerme para ambos mirar a la puerta  –Oh.– dice la amiga gritona al vernos –¿Interrumpo algo?– pregunta sorprendida.

Siempre interrumpes, chica.

–No, no, no.– dice Valentina saliendo de mi agarre, nuevamente, peor está ves un poco nerviosa.

–Solo era un buen momento de primo a prima, normal.– digo sentándome en el suelo y odiando a esta loca.

–Bueno, esta bien, pero Valentina y yo tenemos un tema pendiente.– dice mirándola –Como que anoche me dejasteis en el piso y no en mi cama?– pregunta.

–Si, Miranda, si, no me tienes que agradecer por no dejarte en el club y  llevarte a tu casa. Dejarte sana y salva en tu cuarto. Y de paso, yo dormí en tu cama cama, me lo merecía- dice Valentina y sonrío triunfante.

–¿Con que en su casa?– pregunto.

Ye he podido salir de dudas y eso me relaja.

–Agh.– me mira Miranda con disgusto –Vamos Vale, tenemos mucho que hablar.– dice la loca llevándose a mi Va...prima, mi falsa y linda prima.

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Hola!
En multimedia, Valentina.

¿Primos? | disponible hasta 31/dic/2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora