𝖭𝖺𝖽𝗂𝖾 𝖢𝗈𝗆𝗈 𝖳𝗎́『Bʀᴏʟʏ x Cʜɪʀᴀɪ』

Capítulo 17

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A Broly solamente le faltó volar, pero la cuestión es que llegó rápidamente al hospital luego de robarse una bicicleta en la universidad porque no tenía dinero para un taxi o bus.

La bicicleta no tenía frenos y por la velocidad en la que iba terminó estrellándose contra el puesto de periódicos que estaba enfrente del hospital, provocando que las hojas volaran.

—¡Ya llegué! —Broly se levantó cojeando y Gogeta soltó a reír porque el estrellón fué gracioso— ¿Dónde está Ethan? ¿Lograron calmarlo?

—Casi se nos muere el niño, hermano. —Gogeta le ofreció su hombro al moreno para que se apoyara— Necesita verte porque de lo contrario empeorará. No viene al caso pero ¿de dónde sacaste esa bicicleta?

—La tomé prestada, pero la devolveré.

—Jóven, debe pagar los daños. —intervino el hombre de los periódicos.

—Amigo, luego lo solucionamos. —le aclaró Gogeta mientras arrastraba a Broly al interior del hospital.

Juntos abordaron el ascensor y Broly se olvidó que estaba cojo ya que terminó corriendo a la habitación de Ethan porque desde el pasillo se escuchaba su llanto.

Kale trataba de calmarlo y al igual que él, estaba llorando porque no sabía como manejar la situación.

—¡Ya estoy aquí! —Broly caminó hasta Kale y el bebé apenas notó la presencia de su papá abrió los brazos para que lo cargara.

—¡P-pa-pá! —apenas estuvo en los brazos de Broly, Ethan lo abrazó con fuerza y dejó de llorar inmediatamente.

—¿Qué pasó, ah? —Broly se sentó sobre la cama y le secó las lágrimas que tenía derramada en las mejillas y le limpió los mocos— Papá ya está aquí, no estás solo.

Ethan frunció los labios y volvió a romper en llanto, pero Broly lo abrazó y comenzó a caminar con él en los brazos para reconfortarlo y comprendiera que su papá estaba ahí.

—¿Qué te han dicho los médicos?

—Le están haciendo exámenes de sangre porque creen que el sistema de Ethan no está reaccionando bien al medicamento y no ha habido mejoría con las quimio y las radioterapias. —aclaró Kale— Y me pareció escuchar que al parecer Ethan necesitará trasplante de médula ósea y lo más probable es que vengan a tomar muestras de nuestra sangre para ver si somos compatibles con él.

Broly asintió y con el bebé más calmado volvió a sentarse en la cama. Ethan se negaba a soltarlo de la sudadera con miedo a que él se fuera.

—No me voy a ir, tranquilo. —el moreno le terminó llenando el rostro de besos y le acomodó la cánula nasal que le estaba ayudando a respirar en estos momentos.

—¿Qué te costaba, papá? —inquirió Gogeta muerto de la envidia.

—Ni siquiera sabes quién es tu papá. —le echó en cara Broly y Gogeta se llevó las manos a la cintura ofendido.

—Bajaré por café, ¿Quieren? —les preguntó Kale y los dos asintieron— Ya vuelvo.

La morena salió y el dúo de amigos quedaron solos, pero pronto la habitación fué invadida con la presencia de Goku y Vegeta, quiénes cargaban la silla mecedora de Ethan.

—¿Qué rayos? —Broly no aguantó la risa porque solamente a ellos se les ocurría traer esa silla desde la casa del moreno hasta el hospital— ¿Cómo los dejaron entrar con eso?

—Nos tocó rogarle al portero para que dejara entrar a la silla, además le dijimos que esta silla era lo mejor para hacer dormir a Goku Emilio. —Goku arrastró la silla junto a la cama e inmediatamente Broly se sentó sobre ella con el bebé acostado sobre el pecho—  Casi nos devuelve a nosotros también porque no era hora de visita y nos tocó pararnos firme ante él y decirle que éramos el padrino y tío de la pequeña bestia y que no nos iríamos sin pasar a verlo primero.