XI

279 35 34
                                    


Jaewon

  —  ¿Por qué rapeas?-pregunto serio. Manteniendo su semblante frio de siempre. 

  — ¿De qué hablas? 

  —¿Por qué rapeas?-volvió a realizar la misma pregunta. 

  — Porque me gusta. Estamos perdiendo tiempo.-hablé enojado. 

  — Chico escucha. Eres bueno componiendo, pero no transmiten ningún sentimiento.-Me quedé perplejo. 

  —¿Sentimientos? Pero de qué dices.

  — No te creas que rapear se basa en insultos, mujeres y dinero. Es una forma de expresar sentimientos ya sean buenos, malos.   

  — ¿Y que se supone que haga?

  —¿Por qué estás aquí?-el ambiente se comenzó a volver tenso. 

Pero que mierda le pasaba ahora, cambiando la pregunta de forma rando.  

   —¿Qué piensas psicoanalizarme?-me rei. —Para poder trabajar y tener dinero haciendo lo que me gusta-me miró incrédulo.    

   —Eres mas cerrado que una cabra chico. No entendiendes una mierda.-se comenzó a cabrear- Pero aun así seguía manteniendo su postura.— Tu no has venido hasta aquí porque solo te gusta, estas olvidando la verdadera razón por la que rapeas. Pierdes tiempo valioso. 

  —¿Perdiendo tiempo? Vivo en los ensayos. 

  — ¿Y qué pasa con el estudio? Haces lo posible para evitarlo.  

  —Es mentira.-nengue lo obvio. Era verdad, lo evitaba, pero seguía sin entender la razón.

 Cuando era más joven, llevaba en mano un cuaderno vaya donde vaya...

La presión me impedía pensar con claridad, ser el líder no era una tarea fácil. Las preguntas del qué dirán ante la diferencia de ocho años de edad con mi compañero, me hacia sentir mal. 

A todos los lugares donde íbamos preguntaban mi edad, haciéndome sentir incómodo y molesto. 

Samuel era diferente, él no tenía problema con ello. Se podía desenvolver con facilidad fuera donde fuera, ganándose así la atención de todos.  

 Sentía vergüenza andar en por las calles a su lado.   

 Samuel para mi era como un hermano pequeño. Aunque no teníamos demasiada confianza, al llegar la noche me pedía que lo tocara; me negaba, pero terminaba cumpliendo sus caprichos. 

  — Quiero verte mas seguido por el estudio.-se retiró dejándome solo, con hojas y un lápiz.

¿Por qué rapeaba? 

Esa pregunta seguiría con una incógnita por muchos tiempo, años tras años, y quizas jamas encuentre una respuesta. 

Mis sueños habían tomado diferentes caminos al pase de los tiempos... el sueño de ser cantante era diferente, era un deseo reprimido desde que era un niño.

Mi Niño Prohibido |1PunchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora