No puedo dormir como siempre, demasiada reflexión, he pensado tanto que siento que cada vez estoy más cerca, de mi, de lo que decidiste abandonar, aquel que te amó como nadie lo hará, quizás me digas que no es así, pero solo hay un yo, aquel que al mirarte sonreía y sus ojos tristes buscaban que tu también lo hicieras, solo uno, quizás parecidos pero solo este corazón que latía a este ritmo por ti, me dijiste que ya no me amabas, que ya no querías seguir intentando, lamenté no encender tu corazón como tu encendías el mio, como un simple gesto me alegraba el día, no se por cuanto tiempo sentiré esto, no estoy seguro de nada en este momento, pero aunque te ame como a lo único que me ha gustado de este mundo de mierda, aunque te extrañe como si fueras mi oxígeno, no te hablaré, no te buscaré, no apareceré en tu vida, te amo como se aman las flores, de lejos, porque al final solo te marchitabas conmigo, aunque te cuidara, no era yo a quien querías, pero nadie te cuidará como yo y lo sabes. Estoy muy cerca de mi, al verme al espejo casi puedo ver lo que soy, no parezco lo que creía que era, no soy lo que quiero ser, soy más que eso, un joven que fue sincero con su corazón y no fue correspondido, patético y orgulloso de nunca haber dado un paso atrás, pero no habrán pasos adelante nunca más y el cuervo en el dintel de la puerta me lo recordará.
Mi única venganza será que no leerás esto, que te amare por mucho tiempo y tu no lo sabrás.
