4

3.9K 519 196
                                    


-¿En realidad quieres ir?- preguntó, ganándose como respuesta una de mis tantas versiones de 'miradas burlonas'.

-Oh claro que no.- contesté. -Quiero perderme la oportunidad de mi vida. Eso es lo que los humanos hacemos.

-No quiero llevarte.

-No me lleves entonces.- alcé el pie derecho y lo moví en círculos con una expresión estudiada, segura e irónica en mi rostro. -Tengo piecitos que pueden llevarme a su casa.

-Pues espero que terminaras la canción que te pedí antes, si ya no me necesitas más, es tu turno de terminar con tu odioso trato.

Mi ánimo cayó y formé una línea recta con mis labios para mostrarlo.

-Esto no ha acabado. Acabará cuando JaeBum caiga rendido a mis pies.- exclamé con la mano en alto.

Y lo haría.

-Sonaste como...

-Cierra la boca, Hoseok.

-¿Por lo menos la has empezado ya?- insistió.

La realidad era, que no tenía tiempo para pensar en su canción. Digamos que no soy buena componiendo para... amores pasados.

-No. Lo siento.

-¿Disculpa?

-¿De qué se supone que quieres que escriba?- me acerqué a él con la intención de retarlo, empezando por una mirada. -¿De dinosaurios?

-No sé. De ti y de mi.

-¿Tú y yo?- sentí mi voz temblar y mi orgullo fracasar. Porque al verlo y recordarlo, causaba que mi seguridad se hiciese cada vez más débil.

-Sí. Escribe una canción acerca de una chica que ilusiona y luego deja a la persona en cuestión para volver mágicamente y pedir algo que no merece.

Mi corazón se rompió en pedazos al escucharlo. Lo cierto es que verlo sufrir no me es placentero.

-Hablamos de eso antes. Quedó que no volveríamos a molestarnos.- dije.

-Exacto. Y al parecer no has cumplido con tu parte porque este trato me molesta.- habló duro.

-¿Qué pasó con el Hoseok que hacía chistes y reía?

-Soy así. Tú no lo puedes ver, pero soy así.

Mordí mi labio inferior y me senté en el pupitre que había usado un día antes.

Estiré mi brazo, con la intención de relajar el ambiente un poco y palmeé el pupitre a mi derecha.
Con una exteriorización extrañada sobre sus rasgos faciales, hizo lo que le pedí mientras me miraba expectante.

-¿Cómo ha ido todo en tu vida últimamente?

Él rodó los ojos y pegó una risotada.

-¿En verdad?- clamó mordaz.-¿Es este tu plan para hacer las pases?

-Sólo dime.- pedí.

Hoseok se acomodó en el asiento, y apoyó el pie sobre su rodilla, al mismo tiempo en que echó la cabeza hacia atrás y cerró los ojos. Entrelazó las manos y las pasó detrás de su nuca.

-En realidad, me ha ido bien desde que hiciste lo que hiciste.

Traté de imitar su posición, pero sólo logré juntar mis manos sobre el estómago y mirar hacia el techo del viejo y solitario salón de clase.

-Me he disculpado millones de veces.- respondí sincera. -Y no es broma.

-Yo te he perdonado otro millón más y tampoco es broma. Pero perdonar y olvidar son cosas distintas, Hyori.

How To Love. ✄ HoseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora