What if...?

Traspié

Abigail salió de la habitación sonriente, todo había salido bien. La expresión de Stark había sido la misma que la primera vez que le había mostrado sus poderes, él la creía increíble y asombrosa, y con el permiso de ella, insultó a sus padres por no haber visto cuán magnífica y especial era ella.
Apenas había cerrado la puerta tras sus espaldas cuando vio a Bucky, estaba recargado en la pared frente a ella, con los brazos cruzados sobre su pecho.
-He notado tu ausencia.
-Lo lamento, había unos cuantos cabos sueltos que tenía que atar.
-Ya lo veo - la expresión de Bucky era sería, no había ni un mínimo atisbo de coquetería en sus ojos.
-¿Qué sucede?
-Sólo me he dado cuenta de las cosas, confías más en él que en mi.
-Eso no es cierto.
-¿Entonces por qué le has contado todo eso? ¡Yo apenas y sé tu nombre!
-Por que yo sabía como reaccionaria él, contigo es diferente.
-¿Qué es diferente? ¿Me crees tan estúpido como para no poder entenderte?
-No, no es eso. Yo...
-Entonces ¿qué es?
Unos cadetes pasaron por el lugar y ambos se giraron a verlos. La situación era tensa, pero no le importaba lo que los demás pensarán de ella, sin embargo lo que Bucky pensaba la destrozaba.
-Tengo miedo de perderte James. -Le dijo con la mirada en el suelo y su voz a medio susurro -Tengo miedo de que si me ves como en verdad soy me desprecies. No serías el primero, lo han hecho antes que tú; me han tomado por una loca, demente y me han abandonado. Las personas muchas veces se enamoran de las apariencias e idealizan a su pareja como desean,  pero cuando se cae la cortina, cuando no quedan más que el ser, es cuando por primera vez miran de verdad a la persona frente a ellos, ven sus imperfecciones y defectos. Y ese amor que profesaban, que decían y juraban que sería eterno...se evapora como si nunca hubiese existido.
-Tus poderes no son tú, son sólo una parte de ti- Abigail no supo en que momento Bucky se había puesto en cunclillas para entrar en su campo visual. Era un buen actor, toda su careta de indiferencia había desaparecido y la veía con alegría, sonriéndole.
-¿Steve?
-Somos mejores amigos, no hay secretos entre nosotros, pero no te preocupes los secretos siempre se quedan entre ambos. Tu secreto está a salvo... Bueno al menos de nuestra parte, no puedo decir nada del científico loco.- Se irguió de a poco atrapando el cuerpo de Abigail contra la pared.
-Creas lo que creas, sé que puedo confiar en él. - dijo conteniendo los jadeos que le provocaba la cercanía del cuerpo del sargento.
-¿Por qué? ¿Estas jugando con espadas de doble filo? No soy egoísta pero hay ciertas cosas que no me gusta compartir.
-¿Me estas diciendo cosa?
-¿Te estas compartiendo?
Ella lo tomó por el cuello y lo besó ferozmente, brincando a la vez y enroscando sus piernas alrededor de la cintura de él. En ese momento Howard salió del laboratorio y pesé a su forma de ser, de juego y picardía se sintió avergonzado, iba a regresar al laboratorio pero el sonido de la puerta al cerrarse delató su presencia he hizo a los dos amantes girarse a verlo.
-Stark podrías por favor decirle a este incrédulo que tipo de relación llevamos tu y yo.
Él quería contestar, decir alguna de sus ingeniosas frases pero eso haría que Abigail quedara mal, al final encontró una frase que lo satisfacía sin necesidad de perjudicarla.
-No sabría como describir nuestra relación querida Abigail.
Bucky se giró hacia ella frotando su nariz contra la mejilla de Abigail, como queriendo decir que ella le pertenecía.
-Te estoy pidiendo ayuda.
-¿Qué somos? No somos colegas y no te considero mi amiga, eres algo más.- Bucky la apretó más contra sí y Abigail no supo si fue a propósito o un acto primitivo pero ella hubiera jurado que lo escucho gruñir.
-No he intimado jamás contigo y no me dirás que miento.
-¿Cuenta cómo intimar la vez que dormimos en la sala?
Eso fue suficiente para Bucky, soltó el abrazo de Abigail y sin que ella pudiera hacer nada golpeó la cara de Stark. Él retrocedió por el golpe hasta estar contra el otro muro, su nariz sangraba a borbotones, Abigail temía ese resultado y se culpó por no haberlo podido evitar.
-¡Aléjate de ella ¿entendiste Stark?!
-No necesitas hablar por mí- dijo Abi inclinándose para ayudar a Stark.
-¿Lo defiendes?
-Claro que lo hago, esa es su manera de ser, tan sarcástico e infantil... Sólo su hijo lo hacía actuar conforme a su edad.