Íncubo |H.S|

Capítulo 28:

“Gracias Harry”.

Esas palabras rondaron por la mente de Harry toda la noche. Se sentía culpable al decirle cosas que no pasarían. Sería todo lo contrario. Dos días, y el tendría que dejarlos.

Cada vez se le hacía más difícil alejarse de aquella chica que un principio el le había hecho daño y ahora ella lo era todo para él. Ella fue quien lo enseñó a reír y a buscarle solución a las cosas sin tener que hacer daño, le enseño que no todo se consigue a la mala,que todo se consigue con empeño y fe. Le enseñó a amar,querer y no odiar.

El era un gilipollas y ella logró cambiarlo.

Pero los dos eran tan necios que no se daban cuenta. Mutuamente se habían ayudado.

Un Íncubo y una humana. Mala combinación para muchos,pero sorprendentes para otros.

Harry miró como por sexta vez a Ekaterina y luego a su hijo. Todo se estaba complicando. Todo se le había salido de las manos. Una simple obsesión se convirtió en cariño. Esa chica que alguna vez el humilló y asusto ahora significaba todo para él.

Caminó hasta al lado de la cama y observó a Ekaterina,podría ser que ella no tuviera un cuerpo curvuliento pero para el había sido el más hermoso que había visto, su senos eran pequeños pero redondos y rosados. Le encantaba cuando sonreía y a cada lado de su sonrisa le salieran hoyuelos. Harry miraba fascinada mente a aquella chica y pensó que había sido su mejor elección, para el ella era hermosa.

Con sus tercos y largos dedos acarició el suave cabello de Ekaterina,enrolló uno en su dedo y salió un perfecto rizo,sonrió ante eso. Harry la observó por última vez para luego irse al otro lado de la cama y esta vez observar a su hijo.

Aquel niño sin duda iba hacer un rompecorazones. Se notaba a kilómetros que iba a sacar el cabello rizado como Harry, tenía los ojos de su madre y una nariz chica como Ekaterina,tenía unos labios rosados en los cuales cuando sonreía se le formaba unos pequeños pero pronunciados hoyuelos.

Harry volvió a sonreír y comenzó a caminar hacía la puerta para poderse dirigir a la cocina. Pero una dulce pero ronca voz no se lo permitió.

“Harry”–susurró Ekaterina restregándose sus ojos y sonriendo.

“Hola Dulce Ekaterina” – ante la mención del apodo de Harry las mejillas de Ekaterina adquirieron color.

Harry regresó hasta la cama y le sonrió.

“¿Para donde ibas?”–murmuró una Ekaterina con el ceño fruncido.

Harry tuvo que fruncir los labios para no reírse ante la preocupación de Ekaterina.

“Iba a la cocina,no me iba a ir”–dijo Harry burlesco.

Ella sólo puso los ojos en blanco para luego bufar.

“Solo preguntaba,amargado”–murmuró bostezando para luego caminar hasta el baño y lavarse sus dientes.

“Soy un íncubo cariño,¿que esperabas?”–murmuró gruñendo.

“Gruñón de mierda”–susurró Ekaterina,pero Harry la había escuchado.

“Me lo has pegado tú ”– contraatacó Harry.

Ekaterina lo miró para luego sacar su cepillo de la boca y escupir la pasta en el lavamanos.

“¿Sabes?Ese movimiento de boca me puso–dijo Harry sonriendo de lado para luego mirar sus pantalones.

Ekaterina se burló de Harry para luego pasar por su lado y ignorarlo.

Harry gruñó para luego agarrarla del brazo y besarla salvajemente.