La Boda (Part.2) (TVD) (delena) (luna Llena)

Capítulo 3: Invitación

Una semana después

DAMON

El constante vibrar de mi celular me sacó de mis sueños, el ruido que hacía contra la madera de mi mesa de noche era insoportable. Elena y yo nos habíamos dormido tarde antier por estar preparando las invitaciones para enviarlas; ayer pasamos temprano y dejamos un par en la oficina postal mientras las otras las repartimos personalmente. Habían sido días agotadores para ella y hoy solo queríamos dormir hasta que se nos diera la gana.

—Contesta esa basura, Damon—Murmuró de mala gana mi Elena, tenía la cara pegada a la almohada y luchaba por no escuchar el celular vibrando.

—Lo lamento, vuelve a dormir, Koala—Le di un beso en la cabeza y tomé el celular para después salir de la habitación y contestar de mala gana, el bendito número ni siquiera estaba registrado.

—Quien quiera que seas, tienes 15 segundos para decirme que demonios se te ofrece...

—Hola, hermano, yo también te extrañe—La voz de Stefan me petrifico por unos segundos, ¿había escuchado bien?—Llamaba porque recordé que nunca les pregunte sí habían llegado bien, después de todo no me encontraron el sitio más seguro del mundo.

Fruncí el ceño llenándome de total confusión, habíamos regresado hace tres semanas; además, habíamos enviado la invitación a su apartamento de Nueva York y él siempre terminaba por volver a ese sucio y viejo lugar.

—Estamos bien, Elena y yo dormíamos y sinceramente no se que han hecho los demás, no viven aquí y nos los llamo seguido.

—¿Ha pasado algo?¿porque ya no hablan seguido?¿en donde están?

—Han pasado muchas cosas, pero hasta donde me he quedado yo, todos siguen en el pueblo, ¿tú donde estás?¿Al fin te haz salido de ese maldito lugar olvidado por dios?

—Estoy en Nueva York con Meredith.

—¿Quién demonios es Meredith?—Esta conversación tenía menos sentido con cada segundo que pasaba, apostaba todo mi dinero a que mi hermanito estaba borracho como mínimo. Pero si en verdad se había conseguido una chica tan rápido debía darle crédito, yo pensé que se mantendría soltero hasta el siguiente siglo.

—Es algo así como mi novia, lo siento olvide mencionarlo, pero llevo como un mes con ella. Me acompaño a España y todo, no pude presentarlos.

—Eso suena alentador, parece que avanzas rápido, hermanito. Todos se alegraran de saber que al fin te haz conseguido una novia para traer al día de acción de gracias...

—Preferiría no meterme con temas tan delicados y formales por ahora, dije que era algo así como una novia, nunca afirme que lo era sin lugar a dudas—Solté una risa irónica por su respuesta tan al estilo Damon y negué con la cabeza.

—Entonces diviértete todo lo que quieras, para eso tienes una eternidad—Soltó una risa amarga—Cambiando un poco el tema, ¿haz revisado el correo tu departamento?

—Pff no desde hace como 20 años.

—Deberías hacerlo, te mande algo...

—Lo haré en un rato, por ahora debo colgar. Hablamos después—Colgó la llamada sin dejarme decir nada más y solté un suspiro. 

Quizá no tomaría muy bien la noticia de nuestra boda, pero Elena y yo lo queríamos mucho y era una persona importante con la que queríamos compartir ese momento. Aunque entenderíamos perfectamente si no aceptaba, supongo que tenía derecho a enojarse y mandarnos a la mierda con nuestras invitaciones...

Me metí de nuevo en la habitación y me acosté con cuidado de no despertar de nuevo a Elena.

STEFAN

En cuanto colgué la llamada con Damon, baje a la recepción y me acerque a los buzones que estaban en la pared. Abrí el mío y tomé la única carta que no estaba llena de polvo, su papel se veía de un blanco cremoso y tenía decoraciones negras y doradas esparcidas por todos lados, al darle la vuelta las iniciales E&D estaban grabadas en el papel con color dorado y resaltados de la orilla con negro.

Extendí el sobre quitando el pequeño y sencillo seguro de papel, las letras cursivas y perfectamente detalladas llenaron mis ojos.

Elena Gilbert y Damon Salvatore                                                                                                                                          Tienen el honor de invitarl@ a la celebración de su unión matrimonial, se llevará a cabo el día 15 de marzo en la casa de huéspedes Salvatore, localizada en Mystic Falls; Virginia.

Se espera su asistencia con alegría y dicha para compartir este momento tan importante en la vida del futuro matrimonio.

"Su amor perdurara para siempre y jamás tendrá limites".

Respire con fuerza y trague saliva, sentía un terrible nudo en la garganta y el pecho. Tome otra carta del buzón, solo era la cuenta de la luz, pero prefería leer esa a la anterior. 

Había dejado que ellos fueran felices creo que era muy obvio que no desperdiciarían el tiempo, ¿pero porque me afectaba tanto? yo tenía que ser fuerte, Damon era mi hermano y no podía perderme el día mas importante de su vida. Ni él ni Elena tenían la culpa, ellos solo se habían dejado llevar por su sentir cuando yo ya no estaba presente y no podía obligarla a quererme; había encontrado su felicidad y yo debía hacer lo mismo, aún si me dolía.

15 de Mazo...

Faltaban dos meses para eso todavía, pero yo tenía tantos asuntos sin revolver en Mystic Falls y no podía aparecerme el día de su boda a resolverlos. Tenía que regresar al pueblo y dejar todas las cosas en paz para que ellos supieran que de verdad los apoyaría, su felicidad era tan importante como la mía y lamentablemente no había podido darme cuenta de eso antes.

Desperté a Meredith  y empacamos un par de cosas en el auto antes de subirnos a el y partir rumbo a Virginia. Esta chica estaba enterada de todo mi drama, la había conocido unos días después de que me marche del pueblo y desde entonces me acompañaba a todos lados. No llevábamos una relación con un nombre, ambos estábamos conscientes que lo que nos unía era en realidad la soledad. No sabía mucho de ella y yo solo le había contado mi motivo de huir de Mystic Falls por lo que tampoco sabía mucho de mí, éramos dos desconocidos unidos por la soledad y la falta de algo mejor que hacer.

Quizá no sería tan buena idea llevarla, pero tampoco me sentía bien dejándola cuando ella me había acompañado durante estos meses tan difíciles. Incluso se había ido a España conmigo a pesar de las mil advertencias que le hice del sitio. Merecía estar aquí, sería tal vez el último favor que le pediría y era una fiesta, hasta podría divertirse.

Pasamos las horas de camino hablando de cosas triviales, ella era una vampiro antigua por lo que tenía historias interesantes y yo muchas horas libres. Fue así como paso el tiempo rápido y apenas sentí cuando llegamos al pueblo; estacioné el auto y al tocar la puerta solo esperamos unos minutos antes de que alguien abriera...

Elena...

Holaaa

Me encantaría saber que es lo que piensan de las mejoras que les estoy haciendo a la historia. Los leo en comentarios por si gustan dejarme alguna opinión.

Los demás capítulos los iré subiendo poco a poco, quizá en tandas de tres como esta vez, pero ya veré.

Por lo mientras cuídense mucho, voten y comenten sí les ha gustado, no saben cuanto aprecio su apoyo.