Comencé a correr por todo el patio de la casa esquivando todas las bombas de agua que papá y Emily me lanzaban.
—¡No es justo!—les grito cuando tengo la oportunidad.—¡Son dos contra uno!
—¡En la guerra todo vale!—grita papá de vuelta.
Así que quieren jugar.
Corro por detrás de los arbustos hasta llegar a la manguera. La tomo entre mis manos y la corto en la punta. Doy el agua al máximo y corro de nuevo dándole todo el largo a la manguera hasta llegar donde papá y Em. Cuando me pongo frente a ellos, suelto la manguera y los apunto.
El agua sale en menos de un segundo y veo como Pao y papá ya están completamente mojados.
—¡Eso no se vale!—me grita Em.
—¡En la guerra todo vale!—le grito antes de entrar nuevamente a casa.
Tomo una toalla del lado del ventanal antes de meterme a casa. Miro con siempre la decoración de la sala. Paredes blancas, sofás negros, alfombra negra en medio y sobre esta la mesita de centro, la televisión plasma en la pared y como siempre los cuadros de nosotras cuando bebé.
Primero Camila, sale en un triciclo con solo un diente, mientras su ya largo cabello, le caía a los costados de su regordeta cara. Su vestido blancos con flores rojas y un cinturón rojo en su pancita la hacen ver adorable.
Por último es pasable.
Luego viene Em, la cual sale cuando comenzó a engorar como una pelota. Usa un traje rosa con rayas completo, un gorrito con orejas y sale sonriendo a la cámara haciendo notar sus lindos ojos miel.
Y luego viene lo peor.
La última foto es la mía, salgo completamente desnuda mostrando mis pompis redonditas y suave-citas. Estoy de guatita en una toalla celeste, mi cabello negro, en ese entonces, hace que el color de mis ojos se noten mientras, los únicos dos dientes que tenía, quedan a la vista, junto a mi gran sonrisa, en mis enormes cachetes de bebé.
—Odio esa foto—le digo a Mamá cuando la veo, pero esta no me presta atención y sigue en lo suyo.-Gracias mamá, yo también, te quiero.
—Lo siento—me dice.— , es Camila.
Sonrió y paso por su lado antes de dirigirme a mi habitación. Les contaré algo resumido para que comprendan mi situación.
Mi nombre es Danielle Cabello, soy la hermana de la ahora famosa Camila Cabello. Eso es todo lo que necesitan saber.
Volviendo al presente, no es que me desagrade que mamá hable con Cam, pero es un poco triste el hecho de que le preste demasiada atención, y a veces nos dejé de lado, se siente feo y eso siempre ocurre cuando Camila llama, manda un texto, habla por Skype, llega a casa o simplemente cuando pasan sus vídeos por la tv.
No me malinterpreten, amo a mi hermana, pero a veces es un poco exagerada la atención que le dan. Pero papá, es un caso muy diferente, siempre Emily y yo hemos sido apegadas a él, y lo mismo le sucede a él. Él no es como mamá, ella le tiene un cariño especial a Camila que a nosotras no y aunque me lo niegue y diga que nos ama a las tres por igual, se que no es cierto.
—Boris ¿Podemos ir a comprar un helado?—Em esta con su cabeza asomada en la puerta de mi habitacion mirándome con sus hermosos ojos miel.
—Claro peque—le digo.—, deja que me cambio la polera y vamos.
Em asiente y entra a mi habitación cerrando la puerta tras ella. Se sienta en la cama y mira como yo me cambio de remera. Me pongo mi remera favorita que dice "I Don't Even Know Your Name". Tomo cabello en una coleta y saco dinero de mi mochila.
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El novio de mi hermana (Shawn Mendes)
FanfictionCuando divisé el siguiente autobús recordé que no llevaba el cuadro conmigo, maldije en voz alta y comencé a correr devuelta a casa. Entre directo a mi habitación como si mi vida dependiera de eso, cosa que era cierta, y busqué por todos lados la l...