El novio de mi hermana (Shawn Mendes)

Capítulo 11

Antes de que sigan leyendo, no olviden votar y comentar, eso jamás esta demás y a mi no me molesta:) 

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Desperté a causa de los ya comunes gritos fuera de mi habitación.

¿Es que estos idiotas no se cansan de despertar a la gente?

Intente moverme para así poder poner una almohada en mi cabeza y amortiguar la maldita manada de voces que se escuchaban fuera de la habitación, pero un peso sobre mi cintura me lo impidió.

Me gire en dirección del peso y me encontré cara a cara con un tierno y dormilon Ethan.

Sonreí al verlo así, tan tierno, relajado y calmado.

 Era como ver a un bebé dormir.

Me quede como una verdadera psicópata mirándolo todo el tiempo. Memorice en mi cabeza cada facción de su rostro como si fuese la última vez que lo vería.

Cuando deje de mirarlo como un león a su presa, trate nuevamente moverme para así levantarme, lo que causo que el brazo sobre mi cintura se apretara y aún mas, me apretara mas al cuerpo junto a mi.

Inevitablemente me sonroje y solté una risa sin poder evitarlo.

Tape mi mano con mi boca para luego sentir una risita ronca en mi odio provocando un escalofríos y que asi los pelitos de mi nuca se levantarán.

Me gire para observar la dormilona cara de Ethan mientras abría sus ojos y me miraba con una tierna sonrisa.

—Buenos días—dijo con voz ronca.

Mi estomago se revolvió al escucharlo y las llamadas mariposas hicieron su aparición. 

—Buenos días—sonreí igual que él.

Sonreí pero esa sonrisa desapareció cuando me percaté de algo.

Mi aliento debe ser un asco.

Me entro el pánico e intente separarme nuevamente pero no lo conseguí, si no, solo llegue nuevamente a su pecho y conseguí un gran abrazo.

—No te vayas—murmura sobre mi cabeza.

—Quiero ir al baño—susurro

—¿No le podrías decir a tu vejiga que se aguante un poco?

Solté una carcajada y puse una mano en su pecho.

—Lo siento, pero no creo que me haga caso.

Bufo y me soltó.

Salí de un salto de mi cama y entre al baño como si me fuesen a dar un millón de dolares y esos estuvieran esperando en el váter.

Cerre rápidamente la puerta, tome mi cepillo de dientes, lo moje y tire la cadena para que creyera que había hecho mis necesidades cuando en realidad eso era lo que menos me importaba.

Cepille mis dientes lo mas rápido posible, lave mi cara y peine un poco mi cabello.

Salí del baño después de comprobar que no tenía restos de pasta en mi boca o costados.

Camine de vuelta a mi cama y me lancé al lado de Ethan, quien al verme volver, de inmediato estiro sus brazos y me abrazo con fuerzas.

Estuvimos así un rato, sin hablar, solo conformándonos con la respiración del otro y por mi parte, sintiendo los latidos de su corazón que cada vez que yo tocaba su brazo, se aceleraban.