Mi novio es una súper estrella

Capítulo 36

Cuando desperté Emma ya no estaba alado de mi. Bajé a la cocina y Emma estaba desayunando y su mamá cocinando.

— Ya despertaste hija siéntate a desayunar.

— Gracias pero tengo que irme —contesté— no avisé que iba a quedarme y seguramente me espera una gran regañada llegando a mi casa. Nos vemos después.

Salí de la casa de Emma y arranqué el coche hacía mi casa. Cuando llegue Chris estaba preparando algo en la cocina, al parecer mamá y papá no estaban.

Dejé las llaves del coche sobre la mesa.

— ¿En dónde estan mis papás? —Pregunté.

— Se fueron temprano a arreglar los pasaportes. Y descuida que no les dije que no dormiste aquí.

— Gracias. Dormí con Emma... Por si te preguntas.

Días después...

Me encontraba en mi habitación arreglando mi última maleta... Ya mañana me iba... Estaba demasiado triste, ya eran más de cinco veces que lloro y la mayoría enfrente de Ross. De verdad que no quería irme, no quiero que mañana llegue, no quiero dejar a mi novio y a mis mejores amigos...

Me quité las lágrimas que salían de mis ojos y escribí una nota; Voy a casa de Emma así que no me esperen para cenar. - Andy.

Bajé a la cocina y la puse en el refri debajo de un imán para que se detuviera.

Salí de la casa y fui a casa de Emma y cuando me abrió tenía la nariz y los ojos algo rojos.

— ¿Estas... —Es lo que pude decir antes de que Emma se tirara sobre mi y me abrazara... Ya entendía. La abracé también y las dos lloramos.

— No quiero que te vallas Andy. —Dijo cuando nos separamos— hemos sido amigas desde hace mucho tiempo y de un día para otro ya no te veré mas y...

— Tú y yo seguiremos siendo amigas —la  interrumpi— te prometo que voy a volver.

— ¿Y que pasa si no? ¿Qué pass si te gusta vivir allá y te quedas?

— No digas eso. Yo venia a que estuviéramos los cuatro juntos; tú, Sebas, Ross y yo. Ya sabes porque mañana... 

— Entonces vamos por Sebas y de ahí vamos a la casa de Ross a ver películas en su enorme televisión.

— Si quieres... Pero mi plan era ir a comer o al parque... Porque si vemos una película no vamos a hablarnos y...

— ¡Tienes razón! Pero primero vemos una película donde Ross por favoooor ¡sabes que su tele me encanta! —Reí.

Fuimos a traer a Sebas a su casa y él nos llevo en su coche a la casa de Ross. Cuando el abrió la puerta no pasaron ni cinco segundos y mis ojos ardían pero esta vez no lloré, ya no mas lagrimas.

Y como Emma queria, nos pusimos a ver una película en la tele de Ross.

Cuando termino fuimos al Recorcholis y fueron muchas horas de diversión, así como lo quería. Eran las 8:00 pm cuando los empleados nos dijeron que iban a cerrar. Los chicos y yo pensamos que era muy temprano aún así que fuimos a un restaurante a comer. Cuando terminamos los cuatro nos fuimos silenciosamente al auto.

Ross y yo ibamos en la parte de atrás mientras Emma iba de copiloto y Sebas de piloto. Todo era silencio hasta que llegamos a mi casa. Los tres me acompañaron a la puerta de mi casa y antes de girar la llave para abrir los voltee a ver y sus ojos se enrojecieron e inmediatamente los míos también. Los cuatro nos abrazamos y lloramos.

Fue la peor escena de mi vida. Ver a mis mejores amigos y a mi novio llorar me destrozó el corazón por completo y sentí una rabia enorme y quería gritarles a mis padres y a Chris por arruinar toda mi vida. Suena exagerado pero lo hicieron, en un año me regreso pero como he dicho antes; todo puede cambiar en un año. Y eso me aterra realmente.

No quiero irme, aquí estoy bien. Malditos aquellos viejos que quien sabe que hicieron mal ¡¿por qué no lo pudieron hacer mal el próximo año?! ¡Cuando yo tenga 18 y me pueda quedar aquí!

Por favor voten.