SECRET♥ >> C.H.

♥CAPÍTULO 23♥

Calum.

En cuanto salí de la habitación de Rachel, mis amigos me llamaron para ir a un club, al cual acepté.

Será divertido.

-

Camine por la sombría niebla proveniente del cigarro, las chicas bailaban, tomaban y los chicos las acompañaban.

A lo lejos vi a los chicos que me saludaban con la mano.

--Hey Bro.

--¡Hola!

Los salude amistosamente.

--¿Como han estado?-- Pregunte.

--Bien, ¿y tu?

--Pues bien.

Mientras pláticabamos y bebíamos varias chicas se acercaron.

Comenzó musica con ritmo y nos bailaron.
Estaba tan borracho que no sabía lo que hacia.

Una se sentó y pego su sensual y trabajado tracero en mi bulto ya hecho.

Movió sus caderas al compaz de la musica, mientras de que yo a tomaba de la cintura.

Estaba tan cachondo que me segué.

Chris me estaba tomando vídeo.
Estaba tan borracho y cachondo como yo y una chica le bailaba a el.

La chica se levanto de mi regazo dejándome ver su rostro.

No la destinguia bien, pero sus ojos estaban llenos de lujuria.

Su cabello dorado caía por su cara mientras bailaba ahora enfrente de mi. A unos centímetros de distancia.

Con una mano toque el borde de sus bragas y otra la lleve a uno de sus pechos para masajearlos.

Y ahí fue cuando la cosa se puso candente.

Se sentó en mi regazo de frente y movió sus caderas, chocando nuestras intimidades a propósito.
Nuestras respiraciones eran fuertes y agitadas.
Tomo el borde de mi cinturón y lo desabrocho, la tome por el cuello e hice una mordedura en su cuello y lo chupe.

Termino de quitar mi cinturón y volvió a hacer sus movimientos de caderas, cada vez se me ponía mas duro.

Mi mirada se desvío por un segundo a mi alrededor, todo parecía normal, cada quien en su rollo.
Pero Chris había dejado la cámara grabando.
Esto en parte es bueno, así cada vez que vea la grabación podré masturbarme.

La chica beso mi mejilla indicando que volviera a verla y lo hice.

Desabrochó mis pantalones y aún sentados en la silla saco mi miembro de mis boxers.

Ella quito la parte baja de sus bragas para dejar al descubierto su entrada.
Y sin pensarlo dos veces la penetre. Duro y sin piedad.

Ella grito por la sorpresa y su grito hizo que siguiera.

Tome sus caderas entre mis dedos y ella puso sus brazos en mis hombros.

Saltaba encima de mi sin dejar de gemir.

Bajo sus labios a mi cuello y lo beso. Fue a mi oído para que pudiera escuchar bien sus gemidos y de vez en cuando mordía mi oreja.

(...)

Cuando llegamos al orgasmo ella se fue de encima mio y otra se puso enfrente de mi, esta no era como la otra.

Esta era morena.

Ya no quería mas, pero con su baile me prendió.

Y toda la noche me la pase teniendo sexo, algunos sin protección.