The art of love [Yaoi]

XI

Sábado por la tarde, perfecto para salir a dar una vuelta, ir al cine, ir a comer o coger con tu compañero de trabajo.

Noel estaba teniendo una especie de cita con su compañero de trabajo, Charlie. Estaban rumbo a la casa del mayor mientras hablaban y reían.

-Mi casa esta a 20 minutos de aquí- comentó Noel.

-Bien, no será tan difícil llevarte a casa- rió suavemente Charlie.

-Oh sí... por aquí vive Antonio.

-Cierto, muchas veces me lo he encontrado. Espero que no nos vea.

Noel rió y miró extrañado a Charlie. -Y si nos viera, ¿qué pasaría?

-¿No se pondría celoso?

-Pero si no soy Honey- dijo en tono burlón el castaño, ambos rieron.

Charlie miró a Noel y rascó su nuca.

-¿Acaso no son como amantes?

-¿Amantes? ¿Antonio y yo? Pfff, somos sólo amigos.

-Siempre los veo juntos, realmente hacen una linda par...

-¡No lo digas!- gritó el castaño, interrumpiendo al peli-negro.

-¿Por qué no?

-Sólo somos amigos.

-Bien.

Pocos segundos después, llegaron a la casa del mayor. Antes de que Charlie abriera la puerta, Noel puso su mano en la de Charlie y lo miró.

-¿Aún quieres hacerlo? Porque... sabes que no hay problema sino quieres; por eso la cita, para que lo pensaras bien- sonrió Noel.

Charlie se sonrojó un poco y le devolvió la sonrisa, tomando el rostro del castaño y besando sus finos labios rosados.

-Sí, aún quiero hacer esto.

Noel se sonrojó un poco y dejó continuar al mayor para abrir la puerta. Ambos chicos entraron y Noel vio la ordenada sala con un estilo rústico.

Charlie tomó las caderas de Noel y lo apegó a él para besarlo nuevamente, pero ahora con un poco de salvajismo. El castaño siguió el beso, parándose de puntillas para poder abrazar el cuello del mayor. Charlie, hipnotizado por el dulce y adictivo sabor de los labios del menor, profundizó el beso, introduciendo su lengua en la boca ajena, saboreando cada pequeño detalle de esta.

-¿Sabes...? Creo que sería más fácil y cómodo en la recámara- dijo Noel, interrumpiendo el no tan inocente beso y aprovechando ambos para tomar un poco de aire.

El mayor rió levemente, tomó la mano del castaño y lo guió hasta la habitación.

Noel caminó provocativamente hacia la cama, parándose frente a esta y haciéndole una seña al azabache indicándole que se acercara. Charlie sonrió e hizo caso a la indicación de Noel.

El castaño enredó sus delgados brazos alrededor del cuello del azabache, acercando sus rostros. Charlie comenzó a besar a Noel en los labios, bajando lentamente hasta su cuello y clavícula, donde comenzó a succionar para dejar algunas marcas.

El azabache comenzó a empujar a Noel suavemente hacia atrás para recostarlo en la cama. Una vez hecho esto, posicionándose encima de él, se deshizo de la playera del castaño y comenzó a jugar con sus rosados pezones.

Noel comenzó a gimotear, acariciando el cabello de Charlie para después volver a juntar sus labios.

El castaño no lo pensó dos veces, separándose un poco del beso, comenzó a quitar los pantalones del azabache, quién estaba un poco nervioso. Realmente sería su primera vez con un chico, pero por alguna extraña razón, el segundo beso lo prendió enseguida, haciéndolo desear con ansias al castaño.