- Prima... Te llaman por teléfono.
- dile que tengo diarrea.
- oiga, señor Thompson ella tiene diarre-- Salto de la cama y me arranco el teléfono.
- eh, señor disculpe las molestias. ¿Que decía? - me sobe la frente con dolor mientras su jefe la regañaba - sí señor, al volver de vacaciones lo pongo al tanto.
Rapunzel era una mujer joven en sus veinte y tantos años de tez blanca, largo cabello rubio y dorado como el sol, ojos verde aguacate, cara ovalada con mejillas pálidas, estatura promedio y un cuerpo despampanante. Es inteligente, carismática, un poco torpe, con personalidad empática, bondadosa y muy sagaz.
Mérida era una chica de piel lozana y pelirroja con cabellos rulos y salvajes, ojos azul índigo, cara rechoncha y mejillas sonrosadas, nariz pequeña, estatura alta cuerpo de pera y piernas flacas. Es muy bromista, algo inmadura, muy tosca y algo obstinada, demasiado terca y muy competitiva.
Elsa, mi hermana, a sus 26 no los aparenta, tiene ojos celestes, cabello rubio platinado, altura promedio, pies de cenicienta, cuerpo en reloj de arena —y luego se quejan— tez pálida, labios finos de un rojo natural; timidez, seriedad, aristocracia, dominación, inteligencia, elegancia, sensualidad, frialdad y comedia son palabras que la definen perfectamente.
Y yo, Anna Arendell, soy una zanahoria ambulante, tengo pecas, ojos celestes, altura mediana, cuerpo delicado, fuerza bruta —tampoco hay que exagerar, eh— soy muy parlanchina, graciosa, el alma de la fiesta, para hostigadora soy la #1, asustadiza, se me enreda la lengua, buena condición física, muy cortante, algo presumida, ansiosa, adoro el chocolate. En pocas palabras, músculos, gran personalidad y una bomba sensual andante, todo eso y mi perfecto ingles —modestia, ¿dónde?—.
| Rapunzel |
Anna y Elsa se reían de mí cobardía.
Era el mejor trabajo que tenía hasta ahora y ellas casi hacían que me botará mi jefe.
- ¡zorras! - tome la pastilla y me trague sin agua, como la propia macho bravo pecho peludo.
- ¡hola Punzie! - me saludo Mérida fresca como una lechuga. ¿Y esta qué? ¿No le duele nada? Por que anoche precisamente no tomo jugo de manzana.
- sé lo que se preguntan... No, tengo resaca. Me tome mi pastillita anoche y me puse la bolsa caliente. - pensó y rió - son mis mejores amigas, deberían saber que nunca en mi vida eh tenido una resaca gracias a mi. Deberían saberlo más que nadie.
Nos hizo burla y fue a la cocina.
Sip, mis amigas me odian. O no sé si es efecto del alcohol.
+ ¡Fuck You! Fuck You very, very much +
Sonó el celular de Anna.
- ¿Alo? - hizo un puchero, ya sabíamos quién era. - ya te lo dije Hansel, RE-NUN-CIO.
- cambia de número, yo te lo dije... - le cante un par de veces.
Pasaron las horas y Elsa nos convenció al fin de visitar la dichosa presa.
- ¿Donde mierda estamos? - brame atónita.
- esto, es un centro de Bungee Jumping.
- hermana, ¿Tienes fiebre? - le tocó la frente y yo reí.
- no, será divertido.
- esta delirando! - Mérida tomo sus mejillas y ella en respuesta le golpeo las manos. La pelirroja se sobo y la miro con odio.----------------------------------------------------------
los caps seran algo cortos, pero solo por el momento :)
¿Que Tal?
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La Encuesta (Jelsa, Mericcup, Kristanna, Eugenzel) ©
Teen FictionResumen: ¿Por qué demonios tengo que ser tan necia? ¡Claro que sí! Oh, Anna. Es una sencilla encuesta, no leas lo demás, ¡estas ebria! Solo responde las preguntas y te dejaran en paz. Llama a tus amigas para que la hagan contigo. Será divertido, dec...