Comienzo a sentirme nerviosa por Jordán no por mi, esa bruja le acababa de aventar un hechizo y esta completamente petrificado, lo comienzo a sacudir pero nada funciona, también le grito una y otra vez hasta que siento como alguien me jala no pongo resistencia porque se que es el chico misterioso, me coloca cerca de un árbol y se arrodilla hasta que su cara queda cerca de la mía.
-¿Estas bien?-dice viéndome directamente a los ojos.
-Ayúdalo a el-digo señalando a Jordán,el inmediatamente corre hacia donde yo le señaló, aprovecho que el no esta viéndome y veo mi herida. Esta profunda pero en esta momento el que importa es Jordán.
-Esta hechizado-grita el chico misterioso y me hace señas para que vaya, pero no cualquier tipo de señas estas son las señas que utilizamos los cazadores de brujas, tal vez un día vio pelear a un cazador.
Me levanto tratando de disimular el dolor y camino lo más rápido que puedo hacia donde están ellos.
-Tenemos que subirlo al caballo y llevarlo a su aldea, ellos sabrán que hacer-dice mientras continúa revisando a Jordán, y luego lo coloca en sus hombros yo voy detrás de él pero me dice que vaya por el caballo y hago lo que el me dice, acercó al caballo donde ellos están y el lo sube con mucha agilidad y lo acomodamos entre los dos para que Jordán no se caiga, pero la herida me comienza a sangrar mas, corto un pedazo de tela de mi vestido con la daga de Jordán, yo perdí la mía no recuerdo donde la deje.
Me coloco el pedazo de vestido como si fuera una venda.
-Lista?-dice "el".
-Si-digo asintiendo con cabeza. El camina de un lado del caballo y yo del otro mas vale estar seguros de que Jordán no se caiga de ningún lado o que alguien nos ataque por el lado descubierto.Llevamos caminando al menos dos horas porque cada vez esta mas oscuro y me siento mas cansada y pálida, no se que tan lejos estamos de la aldea pero decido preguntarle a el, y me dice que aun falta bastante y que casi no hemos caminado nada, y que no debería sentirme agotada. Lo mas seguro es que me estoy cansando más rápido por la pérdida de sangre, decido poner toda mi fuerza de voluntad para no desmayarme en el camino, Jordán me necesita. Hago lo de siempre cuando me siento mal , me ordenó a mi misma no desmayarme, y ser lo mas fuerte que pueda, y para matar el tiempo decido hablar.
-Porque me ibas a entregar a esas brujas?-digo nerviosa por su respuesta.
-No es de tu incumbencia-dice cortante, me molesta mucho que diga eso porque claro que es mide mi incumbencia.
-Oh si que lo es-digo casi gritando- te salve la vida , poniendo en riesgo la mía.
-Yo...-dice soltando una risa-tengo una deuda que saldar-dice un poco molesto.
-Si me hubieras dicho te hubiera ayudado-digo encogiéndome de hombros y hace que me duela la herida.
-Realmente me hubieras ayudado?-pregunta sarcástico tratando de buscar mi rostro pero yo lo oculto porque estoy segura que la cara la tengo pálida.
-Que no te acabo de ayudar?-digo soltando una risita.
-Gracias y siento lo de Jordán-dice y por un momento creo que realmente se sintió mal pero luego me vio con desprecio, bueno al menos ya me estaba acostumbrando a su mirada.
En este momento tenemos muchas desventajas la primera es que ya esta oscureciendo la segunda las brujas salen mas de noche , tercero las brujas nos están siguiendo, cuarto los guardias nos buscan y quinto Jordán esta petrificado y nos retrasa en el viaje.
-Ana, por aquí-dice el
-Cuanto falta- digo mirando al cielo.
-Si tomamos este camino solo diez minutos , si tomamos el de allá media hora.
-Pero por ahí esta minado de brujas por eso se llama camino prohibido.
-Bueno quieres llegar o no?-dice molesto.
-Que pregunta tan mas tonta obvio que ya quiero llegar.
-Entonces sígueme.
Jamás había entrado por este camino es un lugar horrible árboles flores muertas, cuervos, todo es mas oscuro de lo normal aquí es como si esto fuese una gurid...
Esto es una trampa nos trajo a la guarida de las brujas y yo le creí de nuevo que tonta soy , agarro una rama y golpeó a el chico misterioso en la nunca. Al parecer no lo golpee lo suficientemente fuerte porque se voltea y mi quita la rama y la tira al piso y yo instintivamente lo golpeo en el estomago y luego en el rostro, pero el me toma por los y me tira , entonces comienza a sacar algún tipo de cuerda y se agacha aprovecho y me abalanzo directo a su cabeza y lo tiro pero no tengo la suficiente fuerza y me voy con el y los dos caemos al piso entonces oímos un ruido.
-La chica esta aquí!!-grita una bruja, y salen tres brujas, me paro rápido pero veo que cada vez el vestido esta mas rojo, veo que también el chico misterioso se levanta y nos colocamos espalda a espalda.
-Porque me atacaste?-me susurra enojado.
-Tu te lo buscaste nos trajiste a la guarida de las brujas-digo susurrando.
-Si porque es el camino más corto que hay a la aldea, no te planeaba entregar.
Iba a decirle algo pero entonces las brujas empiezan a atacarnos y el logra tirar a una y comienzan a pelear yo empiezo a golpear a una bruja con una rama y luego recuerdo lo que hice el día que encontré a james. Golpeo a la bruja en su mano y tira su varita después la golpeo en la cara y ella me regresa el golpe tirándome al piso, es algo perfecto porque así puedo alcanzar la varita más rápido pero también me duele mucho mas que antes la herida, sujeto la vista con fuerza y deseo ver a la bruja convertida en cenizas, y eso sucede las otras dos brujas con las que esta peleando el me voltean a ver y levanto la varita hacia donde están y salen volando.
-Como lo hiciste?-dice el.
-No es de tu incumbencia-digo mientras me levanto- y será mejor que corramos no han de tardar en llegar mas brujas aquí.Caminamos rápido y yo siento que ya no llego, vamos jalando al caballo y cuando al fin veo que hemos entrado a la aldea , veo puntitos negros a mi alrededor y solo veo a cazadores saliendo de sus casas corriendo hacia nosotros y entre ellos esta Ralph después solo hay oscuridad.
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La cazadora de brujas
FantasíaAna katherina una chica que vive en una de la mas pequeñas aldeas del reino donde habitan todos los cazadores de brujas , o al menos los que aun siguen con vida,ella amaba sentir la andrenalina corriendo por sus venas hasta que un día un sirviente d...