Capítulo 4

12.9K 702 88
                                    

a/n: Siento actualizar la historia de tanto en tanto, pero... ¿Quién esperaría un horario de actualizaciones ordenado de Desorden Mental?

Disftutad.

-Así que... ¿Qué hay con ella? - Me pregunta Amanda con preocupación en su voz mientras andamos por los pasillos del hospital. Yo le miro con incertidumbre, y la inseguridad se apodera sobre mí. - Ya te enamoraste antes de ella, ¿no?

-Quizá haya cambiado - murmuro, pensativamente.

-¿El qué exactamente? - Insiste, en su habitual papel de mejor amiga/psicóloga. Yo sonrío suavemente, y le dejo un beso en la mejilla.

-La presión arterial de la Sra. Beckson. -Digo, cambiando de tema, y ella pone los ojos en blanco. Soltando una carcajada, le doy un ligero empujón - Te veo luego, amor.

-Ten cuidado con los objetos afilados, chica enamorada - me río en voz alta mientras nos separamos, y suspiro felizmente.

Aquí me siento bien. Mucha gente dice que una profesión como la mía quita la vida social, y dejas de tener tiempo para tu familia porque siempre estás en el hospital. Yo, por otro lado, tengo a mis amigas aquí y disfruto de que mis días sean consumidos por el trabajo que adoro.

Después de revisar los niveles de la Sra. Beckson, me encuentro con el jefe de cirugía de cardio. Al parecer, el hombre me venía buscando. Le tengo mucho respeto por su posición, ya que un día me gustaría estar donde está él, y también porque a pesar de ser de los mejores, es una persona muy humilde.

-Te he estado observando. - Dice, después de unos minutos de charla sin importancia. Yo giro la cabeza abruptamente mientras paseamos por el hospital, para mirarle. - Te has adaptado muy bien. Más que eso, sobresales de la media.

-G-gracias, señor... - digo, aún sin poder creérmelo. Le miro atónita, y él sonríe ligeramente, sus marcadas facciones proporcionando confianza.

-Mañana te quiero aquí bien temprano para acompañarme en una reparación de aneurisma. ¿Puedo contar contigo? -Adopta un tono más serio.

-Por supuesto, aquí estaré. Gracias. - Se limita a asentir y a dirigirse a otra parte del hospital sin decir nada más.

Wow.

Reparación.

De.

Aneurisma.

Me muerdo el labio inferior para no dar grititos de alegría y me apresuro a seguir con mis tareas sonriendo como una idiota. Saco el móvil de mi bolsillo para mandarle a Emma un mensaje con la dirección de la cafetería en la que vamos a vernos esta tarde, y me centro en mi trabajo durante las siguientes horas.

Ya en el vestuario, mis amigas se están cambiando de ropa hablando animadamente mientras yo acabo de atar mis zapatos. Tienen envidia de mi operación de mañana, pero se han alegrado por mí. Mi estómago es un nido de mariposas a causa de la operación, y de Emma.

-Mierda, chicas. - Digo, cayendo repentinamente en un asunto importante. Mis amigas se giran con curiosidad - ¿Qué me pongo?

-¿Es esta tarde? - Pregunta Summer, con una sonrisa insinuante. Yo asiento, y Amanda pone una mano sobre mi hombro.

-Ve desnuda. Así ya sabe lo que se pierde si no te lleva a la cama - Dice, y todas nos reímos.

-Te olvidas de un factor, Ami - Interviene Kate, y Amanda la mira con curiosidad - Ya sabe cómo es Jenn en la cama, estuvieron enamoradas.

-Entonces ve desnuda y así te llevará directamente a la cama sin más reparos - Responde Ami, con indiferencia y encogiendo los hombros. Yo pongo los ojos en blanco, con la preocupación aún sobre mí.

-Ve casual, Jenn - Interviene Stephanie, notando mis dudas sobre el tema - Con unos Jeans y cualquier sudadera irás bien. No es nada formal.

Las demás chicas asienten, de acuerdo con las palabras de Steph. Yo decido hacerles caso, y me pongo a buscar mentalmente sudaderas en mi armario.

-Pues yo sigo pensando que deberías ir desnuda y estampar su cu-

-¡Ami! - Exclamamos todas a la vez, y ella levanta las manos enfrente de su cara queriendo decir "me rindo", y yo sonrío internamente.

-Bueno chicas, - miro mi reloj - me voy a casa a arreglarme. Deseadme suerte.

-Suerte, Jenn - dicen Kate y Summer. Stephanie simplemente sonríe, y yo les sonrío de vuelta.

-Bah, como si la necesitara... - Dice Ami, y yo le doy un beso en la mejilla de agradecimiento por su apoyo y me voy sin decir nada más.

Conduzco quizá un poco más rápido de lo normal, pero sin pasarme. Cuando llego, tardo una hora en ducharme y elegir algo de ropa que sea de mi agrado. Riley me mira extrañado desde el umbral de la puerta de mi dormitorio.

Finalmente, me decido por unos leggins y mi sudadera favorita de Arctic Monkeys, una de mis bandas favoritas. Al mirarme en el espejo, sonrío satisfecha.

-¿Cómo estoy? - doy media vuelta para mirar unos ojos verdes interrogativos. Cuando recibo un maullido suave, doy mi conjunto por aprobado.

-Bien - murmuro - ahora sólo falta la chica.


The way I'm feeling again (Parte 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora