Capitulo 3: Mi pacto divino

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Era el mismo día en la noche. Gendell se despertó y vio que se encontraba en su habitación acostado en su cama y también vio a un hombre sentado en una silla al frente de su cama y le dice:

-Ya te levantas Gendell.

-Si ya me levante, un momento y tu quien eres?-Luego Gendell comienza a recordar lo que paso.

-Si soy yo, el mismo que ves en tus recuerdos.

-Bien, eres un Ángel que me vino a convertirme en Ángel a mí también.

-Sí, pero mi nombre es El Arcángel Gabriel y has dicho bien he venido a convertirte en Ángel.

-Supongo que ya lo hiciste y que yo sin ninguna conciencia alguna reprimí a Teofolio y a sus amigos.

-Eres inteligente, así mismo paso, ahora bien Gendell eso fue sin tu consentimiento, pero Dios quiere que seas tú el que hagas estas cosas con conciencia plena por lo que ahora es tu momento de decidirte Gendell; en verdad quieres convertirte en Ángel.

Realmente Gendell no lo creía y solo se imaginaba las cosas que pasarían, pero había una gran duda entre él y su sentir, es decir, sus sentimientos estaban confundidos, pero pensó y pensó y duro como quince minutos sin dar respuesta alguna hasta que abrió su boca y exclamo:

-Sí, acepto Arcángel Gabriel, lo hago por mi Dios y porque yo sé que esto me traerá buenas nuevas y que podré verlo a él para que me haga lo que me hizo hace dos años.

El Arcángel Gabriel se paró de la silla y en ese mismo tiempo se desvanece la silla.

-Has dicho bien, Gendell, ahora tienes que venir conmigo.

-Vamos.

Gendell y el Arcángel Gabriel se desaparecieron como relámpago y aparecieron en un parque donde no había nadie, pero de repente, escucho un ruido que gritaba su nombre:

-¡Gendell!

-Escuchaste eso Gabriel, alguien clama por mí.

-Si, Gendell, creo debes de ir a ver.

Escuchaba la voz de la persona que lo llamaba y así mismo la utilizaba para ubicarla, pero esa voz se le hacía conocida, se parecía a la voz de Elena y así mismo era, la voz de Elena. Gendell la logro ver y al verla vio a un hombre que le estaba dando golpe para quitarle una cadena. Gendell corrió hacia ellos, pero el delincuente al verlo cogió su pedazo de madera y le ataco dándole en la cara fuertemente, luego Gendell pudo percibir un extraño poder alrededor del hombre que se apoderaba más de él y que cada vez el hombre perdía el conocimiento de quien era. El delincuente se fue sobre Gendell con más fuerza hasta que lo partió por completo y en su último intento Gendell alzo su brazo con el motivo de parar el golpe, pero pasó algo más, el tiempo se paro logrando así el Arcángel Gabriel entregarle una espada brillosa en forma de cruz. Gendell la cogió y golpeó al enemigo partiendo en dos su pedazo de madera y cortándole en el pecho. Cuando esto pasó pudo observar que la herida se veía blanca y salía luz de ella. De repente, del cuerpo del hombre salió un extraño ser de color negro con la herida que tenía el cuerpo, el cuerpo del hombre se había quedado normal sin ningún rasguño, mientras que el ser herido se desvaneció en el aire gritando:

Gendell se acercó hacia Elena desmayada con rostro pacífico y reluciente con una sonrisa diciéndole:

-Toma mi mano que nada ha pasado.

Ella asombraba tomo su mano y el la levanto del pavimento y el dijo:

-Todo esto fue un sueño- y se rió con paciencia al igual que ella.

Al pasar esto ella se desmayo y fue llevada a su casa.

.....

Gendell cuando iba de camino con Gabriel a su casa le pregunta:

Ángel, el renacimiento de un llamado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora