No Juegues Conmigo

Capítulo 1- Me llamo Lea, Lea Davidson.

-¡Lea!- exclamó mi hermana pequeña haciéndome caer de la cama como siempre. Era un mal hábito que la pequeña había cogido.

Mi hermana de 11 años se llama Sandy, mi madre le puso ese nombre porque le parecía un nombre alegre que le pegaba mucho a mi hermanita, pero en realidad mi hermana era peligrosa y su nombre precisamente no le hacía justicia.

-¿Por qué me levantas así? ¿Qué te he hecho?- dije sobándome la cabeza y buscando mis gafas para ponérmelas y poder ver algo.

-Porque me divierte- dijo y sacó su lengua en forma de burla.

-Mala hermana- comenté imitándole el gesto y ella salió rápidamente de mi habitación.

Bueno, después de la escena es hora de presentarme. Me llamo Lea y bueno... pues eso, que me llamo Lea. Perdón es que no se que decir, ya se me ocurrirá algo mientras transcurra el tiempo.

Fui a mi vestidor y cojí unos vaqueros negros ajustados y un jersey gris, nada llamativo. Aquí va un dato sobre mí, yo no soy nada llamativa, en verdad siempre paso desapercibida porque bueno yo no soy la típica chica a la que le gustaba llamar la atención del resto de cualquier manera. Me gusta ser alguien normal y corriente.

-Hora de irnos- abrió mi madre la puerta y se marchó, nuestras mañanas eran complicadas puesto que éramos tres hermanas. Mi hermana mayor Alice que tenía 18 años iba a una universidad cercana, yo iba al instituto Mc.Gregoor y mi hermana pequeña iba a la escuela primaria un poco más a las afueras de la ciudad así que mi madre tenía que llevarnos a cada una de nosotras a nuestros respectivos lugares y luego ella se iba al trabajo. Aunque muchos de los días cuando mi madre trabajaba cada una iba de distintas maneras a su respectivo lugar.

***
*En el instituto*

-Hola Ann- salude a mi mejor amiga la cual conocía desde que tenía 3 años- ¿Preparada para el primer día del último curso?

Ah si, se me olvidaba comentároslo, hoy era el primer día de mi curso como senior.

-¡Si, qué emocionante! Ahora somos las mayores- dijo pegando saltitos y entonces ella dejo de saltar y se acercó un poco a mi oído- ¿Has visto este año a Dustin? Esta guapísimo- obviamente él tenía que salir en esta conversación.

Vaya sorpresa Dustin Moore guapísimo. Bien os explico, Dustin Moore es el chico que siempre me ha "gustado" desde que era pequeña, ¿el problema? Siempre he estado colada por el y cuando éramos más pequeños él también por mi pero no me pilló en el momento adecuado y le dije que no a salir y bueno ahora era el Playboy de la escuela y yo, bueno yo soy Lea, la chica nada popular con pocos amigos, empollona y con poca experiencia en chicos.
En fin digamos que yo no soy la más deseada del instituto, con eso basta. De hecho me juego bastante a que ya ni me reconocería a primera vista, ni él ni mucha gente.

-No, no he llegado a verlo- dije mientras me apresuraba a mi taquilla, allí cogí mis libros de historia y lengua y la cerré de nuevo- ¿por qué preguntas?

-Ya sabes porque- dijo alzando una ceja, pero mal alzada. Solo yo se hacer eso a la perfección.

-Ann escúchame, el es Dustin Moore, no pienso juntarme con él. Además no soy su prototipo de chica.

Colada por un playboy, anda que estoy apañada.

-¿Cómo que no? Eres rubia, tienes un tipazo y puedes ser muy cursi si te empeñas. Nena eres su tipo, lo que pasa es que el no te reconoce desde que cambió tanto.

-Pues eso, ni me reconoce, ni me recuerda, ni lo va a hacer. Además no pienso ser el juguete de nadie ni quiero gustarle solo por mi físico- ¿recordarme? Seguramente lo haga, a ver vamos al mismo instituto el problema es que no cruzamos palabra desde lo mínimo 3 años así que no creo que me reconozca a simple vista, además me da la sensación que el vive en una burbuja con una gente en concreto y el resto no le importamos ni lo más mínimo.