Olivia no se lo esperaba, nuevos misterios, muchas preguntas y algunas sin respuestas. También conseguirá nuevos amigos en quien confiar. ¿Estará lista para todo este mundo sobrenatural?
˗ˏˋ teen wolf universe ˎˊ˗
【 liam dunbar x oc】
TERMINA...
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Estaba en biblioteca buscando un libro de historia que el profesor Yukimura me había ordenado. Esto es definitivamente estresante. Se podría decir que la biblioteca no era mi lugar favorito, aunque me encantaba leer.
Buscaba sin parar aquel maldito libro pero no obtuve resultados positivos.
Mientras leía cada lomo de cada libro, escuché la voz de Liam a unos tres estantes adelante.
—Ella sólo me invitó a la fiesta —podría jurar que estaba haciendo la sonrisa irritante de siempre.
— ¡Sí! ¿No es increíble? Atraigo a las mayores —rodé los ojos. Lo único que pensaba en mi cabeza era darle un golpe en su bonita cara.
—Eso es genial, Liam.
—Lo sé, deberías ir —oí a Liam—. Bueno, me tengo que ir, nos vemos luego Mason —el ojiazul se despidió de su amigo con un choque de palmas y se fue.
Quién lo diría. Una chica mayor que él lo invitó a una fiesta, realmente pienso que aquella chica no lo dejó decir ni una palabra ya que si lo hubiese hecho, hubiera salido corriendo.
De todas formas, no debería estar pensando en él. Tengo que encontrar el maldito libro, terminar mi tarea y salir de aquí. Jordan dijo que cocinaría su receta preferida, no me iba a perder eso.
Una hora después, al finalizar mis tareas, salí de la biblioteca y me dirigí al comedor. Estaba muriendo de hambre.
Me acerqué a la máquina expendedora, inserté un billete, seleccioné unas frituras y esperé a que salieran.
Cuando iba a tomarlas, una mano se adelantó y las tomó por mí. Subí mi mirada confundida y observé al dueño de esa mano.
—Stiles —reconocí y él me tendió las frituras.
—Si hubieses llegado antes, no te habrías perdido la deliciosa comida casi cruda de la cocinera —comentó siendo totalmente sarcástico, ambos reímos por eso. En las pocas semanas que llevo aquí, ya pude saber que la comida de la cocinera siempre estaba cruda o había algún que otro cabello dentro del aperitivo.
—Que bueno que no lo hice —reí.
— ¿Y qué tal las clases? —Preguntó Stiles. Ambos caminamos hacia una mesa en el patio, al llegar, nos sentamos.
—Bastante bien, la profesora Wyland quiere que me adelante el año en biología —comenté mientras abría el paquete de frituras.
Stiles alzó las cejas en forma de sorpresa.
—Eso es grandioso, Olivia. Deberías hacerlo, si adelantas iré contigo.
—Sí, le dije que lo iba a pensar —él asintió y se formó un pequeño silencio incómodo.
