SHE WOLF ¹ | Liam Dunbar

Capítulo 19

Abrí mis ojos lentamente tratando de acostumbrarme a la luz. Quise moverme, pero mi cuerpo estaba un poco adolorido, ni halar de mis oídos.

Lo primero que noté es que seguía en el mismo lugar del bosque. Me incorporé en mi lugar y vi al hombre que me había atacado en estado inconsciente. Pero lo más extraño, fue la chica parada delante de él con una pala. Era rubia, de estatura media y ojos azules cálidos, aunque me veía asustada.

—Creo que lo maté —dijo asustada con la pala en sus manos.

Me enderecé y gateé hasta el hombre, tomé su pulso, y para su alivio, lo tenía.

—No, no está muerto —respondí mientras me paraba lentamente, escuché un suspiro de alivio por parte de ella—. ¿Qué le hiciste?

—Le golpeé la cabeza con esto —señaló la pala. Asentí.

—Gracias por.... Gracias —dije finalmente—. Espera, de algún lado de conozco —pensé y era verdad, creo que iba a la escuela conmigo, pero no recordaba su nombre.

—Nos sentamos juntas en química —hizo una mueca. Me sentí mal al no recordarla desde un principio.

—Ah, sí, eres Gemma —dudé pero ella negó—. Perdón.

—Jenna, Jenna Grey —puntualizó.

—Perdóname, Jenna —me disculpé.

—No te preocupes —le restó importancia.

—¿Cómo supiste? —Señalé toda la escena.

—Es complicado —ella hizo una mueca—. Él es mi tío, bueno en realidad no, es el esposo de mi tía.

Asentí.

—Cuéntame.

—Ah... —se rascó un poco su cabeza nerviosa—. Bueno, él venía actuando bastante extraño estas semanas. Lo investigué un poco y encontré una lista de nombres y números —Jenna sacó una hoja de papel doblada de su bolsillo y me la tendió. La abrí y me sorprendí al ver la lista negra con mi nombre marcado con un círculo rojo—. Al principio no lo podía entender, pero después todo encajó. Mi tío tiene muchas deudas y él había comenzado a alardear de que finalmente tenía el dinero, así que esos números podían significar muchas cosas. Así que finalmente, aquí estoy.

Asentí procesando sus palabras.

—¿Sabes por qué está mi nombre ahí? —Musité nerviosa por la respuesta.

—Sí —respondió al instante—. Seres sobrenaturales de toda la ciudad. Te sorprenderás como lo sé.

—¿Y cómo lo sabes? —Fruncí el ceño.

—Creo que la gente es muy ignorante como para notar los cambios de Scott McCall, Stiles Stilinski y Lydia Martin, a pasar de los años —explicó—. Soy muy observadora y detallista, siempre supe que había algo raro.

—Sigo sin comprender.

—He vivido en Beacon Hills toda mi vida —comenzó Jenna—. Conozco a esos chicos desde kínder, era imposible que Scott fuera capitán del equipo, extrañamente fuerte y dejar de ser asmático de un día para el otro —se cruzó de brazos—. Así que los observé siempre, nunca dije nada y no planeo hacerlo.

—Eres muy inteligente —fue lo único que pude decir.

—Preferiría el concepto prudente —se encogió de hombros—. Aún así, me faltó comentarte algo.

—¿Qué cosa?

—Creo que no notaste mi nombre en la lista —indicó con su dedo índice donde se encontraba su nombre, unos lugares más abajo del mío. Me sorprendí. ¿Por qué soy tan despistada?