Mi Príncipe Azul [#2]

Capitulo 21

<< –Ahora sí, dime la verdad-Dijo mirándome fijo a los ojos.

-¿Qué?-Pregunte sin entender.

-¿De verdad te pusiste celosa?-Pregunto riendo. Yo rodee los ojos y mordí mi labio inferior. Lo mire con una sonrisa y luego mire hacia otro lado algo nerviosa.

-No-Conteste intentando ser lo más convincente posible, pero mi sonrisa me fallo.

-No lo puedo creer-Dijo Ian con una sonrisa. Se acerco a mí y me encerró entre sus brazos. –Ay... ella la celosa-Comento burlándose.

-No me puse celosa-Contradije mientras lo golpeaba para que me soltara.

-Ay a mi no me mientes, te pusiste verde de los celos-Dijo mientras me abrazaba con más fuerza. Su risa no dejaba que siguiera negando lo que él pensaba. Aunque siguiera esforzándome por alejarme de él, Ian seguía abrazándome con más fuerza. –No entiendo porque te pones celosa, tú siempre estarás primero que cualquiera. >>

-Zo, ¡Zo!- Llamo Austin chasqueando los dedos frente a mi rostro, quitándome completamente de mis pensamientos.

-Ho disculpa-Me perdone apenada. No puedo creer que me haya distraído con ese absurdo recuerdo. –Lo siento, estoy un poco distraída.

-No te preocupes-Contesto con una sonrisa. -¿En qué pensabas? Parecías... triste- Pregunto frunciendo el ceño. Mire la rebanada de torta de chocolate que pedí como postre. No puedo decirle lo que realmente pensaba, es un tonto recuerdo de una estúpida pelea que tuve con Ian por culpa de la zorra, no es apropiado, además, no quiero que Austin sepa cosas de cuando todo estaba bien con Ian, es mejor enfocarnos en el futuro.

-Estupideces-Conteste finalmente. Austin me observo un momento, es obvio que no me creyó, pero no preguntó.

-¿Estas mejor? Hoy te vi muy estresada con todo este tema de que Nicole volvió y no sola- Se explico.

-En realidad no-Conteste fríamente, es verdad, ¿Para qué mentirle? Las últimas ocho horas de mi vida fueron completamente un disgusto. Si no me lo cruzaba en la cocina, lo hacía en el pasillo, si no era en la escalera o en el patio. Ian está en todas partes, si esto fue solo el primer día no quiero imaginarme lo que será el resto de las semanas. –Esto es un completo desastre, no pudo... agh, después de todo lo que paso... esto es muy difícil para mí- Dije frotando mi frente.

-Zo tú no estás sola-Contesto mientras tomaba mi mano izquierda que aun esta sobre la mesa. –Yo estaré contigo, todo estará bien- Finalizo regalándome una enorme sonrisa. Observe por un momento sus hermosos ojos miel. No puedo evitar sonreír cuando él lo hace.

-Gracias-Dije con un tono apenas audible. Apretó un poco más mi mano y luego continuamos comiendo nuestro postre.

La cena fue increíble. Es completamente relajante pasar al menos un momento fuera de la casa. Lejos de la locura, de la falsedad, y de Ian. Adoro estar con Austin, él hace que me olvide de todo. Pero lo triste es que la realidad no se puede olvidar todo el tiempo, uno siempre debe enfrentar sus problemas, la cosa es que, ahora, yo no quiero hacerlo. Llegamos a la casa y como por arte de magia esta en completo silencio.

-¿Te gusto la cena?-Pregunto Austin con una sonrisa mientras nos acercamos a la puerta de mi dormitorio.

-Me encanto, fue muy relajante-Conteste con otra sonrisa. Una pequeña risa salió de sus labios. Es muy hermoso cuando ríe, ¿Cómo puede ser que este muchacho tan perfecto este aquí junto a mi? Me apoye en la puerta de mi habitación y Austin se paro frente a mí, apoyando una de sus manos en la puerta a un lado de mi cabeza, prácticamente acorralándome.