Capitulo 20:Primera Cita

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-Me sorprende que aun creas que no te conozco lo suficiente. -Anuncio Jason acercandose a mi.

Lo escuche caminar hacia mi, pero mis energias estaban por el nivel del Tartaro, asique, ni siquiera me moleste en secarme las lagrimas.
Esperaba bajo la sombra en la entrada del lugar. El cesped era comodo, y aunque habia un sol de bronceado, no hacia tanto calor.
Pensandolo bien,crei que vendría Denny. Pero en su lugar, Jason se sento a mi lado. Pude sentirlo, sin embargo,no lo mire. Seguia apoyando la cabeza entre las rodillas.
De alguna u otra forma, el cesped era mas atractivo que ver las publicidades rosas de Mackenzie.
El estar debajo del arbol se habia vuelto una costumbre inconsiente. La ultima vez que me senté en el mismo lugar, fue cuando mi campaña salia mal, y de la misma forma que paso hoy, Jason acudió a mi estado.

-Crei que te quedarias, estas atrasado en clases, es mejor que vuelvas. -Le replique sentandome contra el arbol, dejando que el chico vea mi rostro. Inmediatamente cambio de posición quedándose de frente. Con sus manos,secó mis lagrimas y sin decir mas nada, reconforto aquella piel.

-No pienso volver. No me iba a ir, pero como tu insistias en que podías tu sola.

-Que podrías haber hecho tu? No eres mi protector en todo.

El chico sonrio, contagiando aquella muestra de alegria.

-No lo soy. Pero podria serlo.

Negue inmediatamente.

-Ya haces demasiado por mi. -Replique sintiendome pequeña y estupida. Las lagrimas amenazaron con caer. Suficiente ya tenia Jason con su vida, no tendria que soportar mis caidas.

-Haría lo que fuera necesario por ti "Sargenta Insoportable".

Y esa era la forma cursi y graciosa de Jason para decir algo cursi, pero intentando que no me de algo. Ademas que aun no me acostumbraba a su trato.

Ni su tacto. Ni su mirada profunda. Ni a su seguridad. Ni siquiera a la nueva Max.

Le agradeci con la mirada, y apoye mi mano en su rodilla en señal de gratitud. El la tomó,y la envolvio con ambas suyas.

-Quieres ir a despejarte?-pregunto sin rodeos.

Dude unos segundos.

-Creo que tenemos que volver a clases.

El chico se rio y se levanto, Sacando las llaves de su auto de su bolsillo.

-Yo creo que no. Tienes una cara de mapache, y aunque te ves bonita, los mapaches se sienten ofendidos.

Jason replico. Le pegue en el brazo con el odio que venía conteniendo.

De pronto estalló en risas y aunque no queria reirme, termine rindiendome y acompañandolo.

Me levante del pasto y tomando su mano lo segui hasta subir al auto. De costumbre, siempre abro la puerta por mi misma, pero esta vez, Jason se opuso.

-Escucha, no me vengas con tu teoria feminista de que "puedo hacer todo lo que tu haces" -dijo afinando la voz y agitando sus manos tratando de imitarme.

Una imitacion muy mala, dejenme decirles.

-Es que es verdad, yo tengo manos Gracias a Dios, asique, puedo abrir mi puerta yo solita. -Respondi con una sonrisa de lado.

-No. En las citas no pasa eso.

-Esto es una cita?-pregunte graciosa.

-No me obliges a repetirlo Máxima, me estoy poniendo nervioso. Deja que te abra la puerta y luego podes hablar todo el camino si quieres de la lucha de las mujeres.

NO QUIERO SER NORMAL.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora