Small Bump.

Capitulo 29

- Buenos días, amor. -Susurra besando la parte trasera de mi cuello riéndose de mi brinquito por el susto que me había dado.

- Uff, buenos días... -Suspiro calmando mi respiración y mi pobre corazón agitado.

- Mmmm, huele sabroso.

- ¿Frute punch? -Le enseño el cartón de jugo y el asiente, me besa los labios y tranquilo se sienta a esperarme en la mesa.- ¿Y ese milagro que no te despertaste cuando me levanté?

- Te voy a ser sincero, mi vida. No te sentí despertar en ningún segundo o si no créeme que hubiese estado hace ratito a tu lado ayudándote. -Se mofa, asiento riendo bajito y sentandome a su lado entregándole el vaso con el jugo.

- Ya sabía yo, me pareció muy extraño. -El se ríe y besa mi mejilla para entonces coger ambos el tenedor e comenzar a comer muy tranquilos y contentos. Justin coge el vaso y le da un sorbo al jugo para entonces comer el tenedor y continuar comiendo, antes de darle una mordida al tenedor me habla.

- ¿Estas en regla? Te veo muy contenta y reluciente. -Me mira atento.

- No, te salvaste por hoy. -Le guiño el ojo y el se ríe.- Por hoy no tienes que soportar mis quejas de dolor, los vómitos ni nada por el estilo.

- Gracias al cielo, si no ya estaría en un estado grave. -Me echo a reír y el igual hasta continuar comer un poco más y luego el volvió a hablar esta vez después de darle otro sorbo largo al jugo e dejarlo en la mesa, me mira atento y yo a el.- Hoy entonces estaremos felices paseando por ahí.

- Por suerte si. -Me Rio bajito.

- Bueno, termina de desayunar para prepararnos. Ya nos iremos. -Se levanta con el plato y vaso en manos para caminar hacia el fregadero, lo miro con sorpresa.

- ¿Que? ¿Tan temprano?

- Es perfecto para estar todo el día en la calle, tu y yo solos. -Murmura tranquilo mientras fregaba el plato y el vaso de espaldas hacia mi.

- Pero si es temprano...

- Es la hora perfecta para irnos a dar una vuelta, tengo pensado ir a muchos lugares y pasarla bien los dos. -Me miro y sonríe guiñando me el ojo.

- Ahí Dios, Justin. -Negué con la cabeza sonriendo. Este ríe y me guiña el ojo.

Le hago caso y camino directamente al cuarto para buscar ropa y prepararme. Justin siempre y sus salidas sorpresas, no le pregunto a donde vamos por que se, conociéndolo tan bien, que no me dirá.