Small Bump.

Capitulo 60

- Deja de decirme Rubio tonto, me duele. -Hago puchero y ella riendo besa mis labios para luego abrazarme.

- Oooww mi bebé hermoso, esta bien, no te diré Rubio tonto. -Sonríe, yo gruño para luego reír bajito.

- ¿Que quieres de desayuno? -Susurro alejandome, burlón rozo mi nariz jugando con la suya.

- Lo que tu me quieras preparar. -Murmura y yo sonrió asintiendo, de momento malévolamente me le voy acercando a su nariz y desprevenidamente la muerdo.

- ¡Justin! -Grita poniendo sus manos contra mi pecho empujandome lo más fuerte que ella podía, pero no lograba alejarme. Obviamente yo soy más fuerte que ella. Grita nuevamente y riendo la abrazo, enredando mis brazos alrededor de su cuerpo.

La aprieto a mi y clavando mis dedos en su costillas ella grita retorciendose, riendo entre dientes continuaba haciéndole cosquillas. Escondiendo mi rostro contra su cuello continuo haciéndola sufrir con mis cosquillas, me súplica que la deje pero no le hago caso, muerdo su cuello y ella grita aún más e intenta alejarme.

- ¡Justin detente! Jajajaja déjameeee... -Vuelve a intentar empujarme, divertido y para dejarla respirar ya de tanta cosquillas me alejó mirándola burlón, me levantó de la cama.- ¡Puto! ¡Eres un puto! -Me grita mientras yo burlón me alejó caminando hacia el ropero, la miro y veo nuestra almohada ser lanzada hacia mi. Riendo la esquivo y la miro burlón.

- Te amo, mocosa. -Rio y esta gruñe.

Dejándola patalear y gritar mi nombre reprendiendome camino dándole la espalda para buscar ropa e irme a bañar, me sentía pegajoso por culpa del sudor. Mientras buscada que poderme para estar en la casa deje de escuchar las quejas de _____, Seguramente ya se abría calmado. Busco y busco cuando frunzo el ceño... ¿Qué le pasa? ¿Por que no la escucho? Cuando me da por voltearme la encuentro mordiendo su labio mientras su mirada estaba directamente a mis nalgas, sorprendido me le quedo mirando y picaron me volteó... Ella rápido se sobresalta y me mira a los ojos totalmente sonrojada.

- Pervertido... -Susurra roja como un tomate, riendo me encojo de hombros.

- ¿No te agrada? -Muevo mis cejas con diversión, ella rueda los ojos y se levanta junto con las sábanas enredadas en su cuerpo.

- Déjame en paz, Bieber. -Bufa aguantando las sábanas a su cuerpo.

Observando hacia donde ella caminaba con esas molestosa sábana tapando su cuerpo, me le quedo mirando y gruño desde lo mas profundo de mi garganta cuando ella se inclina hacia delante frente a una gaveta dejándome a la vista su culo, aunque más bien no se veía nada y eso me frustro horriblemente.