Mi pequeño Demonio. »[Rulexby]«

Capítulo 14.

Narrator's P.O.V:

Mientras graba con su cámara, Mangel gira hacia el otro lado, revelando a Cheeto, Frank, Luzu, Rubius y Abel. Este penúltimo se le veía un tanto nervioso, pero no era nerviosismo del malo, se le veía hasta contento. Tenía sus manos cruzadas, conteniendo su sonrisa; mientras sitúa una de sus manos en su boca, introduciendo uno de sus dedos entre sus labios, "discretamente" mirando a Alex.

[...]

(En la casa de Mangel)

Rubén contó su versión de aquel acontecimiento con Mangel mientras el pelinegro estaba en la cocina. Alex agradecía estar solo ahí, pues estaba lo que seguía de nervioso. Iba acercándose y ver a un Rubén consternado y confundido realmente le preocupaba, cosa que no entendía y se preguntaba una y otra vez qué habrá hecho para terminar así de mal.

—... entonces Mangel me invitó a probar su tan famoso fireball...

Alex asintió, llegando a la razón de tanta preocupación por parte de Rubén.

—... y de verdad que lo último que quería era estar ahí, de solo ver al guarro de Frank...– gruñó y aquel vómito de palabras que había soltado Rubén se detuvo. Dudó por un momento decirle que ese había sido el motivo por el cual terminó en casa de Mangel.

¿Quieres aclarar esto de una vez? Ahí está la oportunidad.

Las palabras de Luzu resonaron en su cabeza.

Alex abrió sus ojos más de lo normal y mientras pedía a Rubén continuar lo que había empezado, no podía negar sentir ese nerviosismo aumentar al escuchar el nombre de Frank salir de los labios del castaño, pues pensó que lo que había pasado en la discoteca Rubén lo había ignorado. Dio media vuelta y miró que Rubén se encontraba en la entrada de la cocina.

—Fuck it.– murmuró Rubén. Respiró profundamente, su mirada encontró la azabache del pequeño. —Sí.– continuó serio. —Me cabreé cuando miré al capullo ese restregándose tan guarramente a ti.– dijo mientras caminaba hacia Alex y tras terminar ese enunciado, sus cuerpos estaban a escasos centímetros. Alex miraba al castaño por debajo de sus pestañas, y este bajó su mirada, la cual era segura y decidida.

.:✿*'✿..:* *.:✿*'✿..:.

Rubén's P.O.V:

¡JODER! ¡LO DIJE! ¡AL FIN! Bueno... no todo, pero ¡voy avanzando!

No puedo negar que siento cómo me he quitado de encima un peso grandísimo. Mis mejillas arden y quisiera que la tierra me tragase en este mismo momento, me siento tan estúpido confesándome a este enano. Siempre ha sido al revés; las chicas confiesan sus sentimientos hacia mí. Incluso llegué a pensar que este parguela confesaría sus sentimientos hacia mí. 

Qué equivocado estaba.

—Quería partirle la cara en mil pedazos, pero...– pausé al ver cómo Alex dio un paso hacia la izquierda y se dirigía al salón. Lo seguí con la mirada y lo seguí. —... tú jamás hiciste nada para detenerlo, así que me cabreé más y por eso decidí irme con Mangel.

—¡Wow!– escuché cierta burla en su tono de voz. —¿En serio esa es tu excusa?– y rio una vez más, burlesco, y tomó su móvil. 

Cierta escena me pareció algo graciosa y adorable, parecía una chica celosa. 

—¿De verdad no viste cómo me quería quitar de encima a Frank?

—Alex, estaba furioso, ¿qué querías que hiciera?

—¿Ayudarme, tal vez?

—Si te ayudaba, Frank en este momento no estaría arreglando sus cosas para ir al InGame. Créeme.