Sumida en un profundo y plácido sueño, fui sobresaltada por el sonido del despertador anunciándome que había llegado el temido lunes. En verdad, no es que tenga nada en contra ellos, pero seamos sinceros, el lunes significa, adiós fin de semana, hola de nuevo semana, y eso no es exactamente el significado de paraíso para mí. Cuando terminé de despertarme, me levanté, me di una ducha rápida, y procedí a desayunar. Al finalizar, cogí la mochila con los apuntes, el portátil y el móvil, de los cuales nunca me separaba, y salí de mi apartamento en dirección a la Universidad para que antes de empezar las clases, me diera tiempo a rellenar los papeles que me faltaban.
Una vez fuera, me colgué la mochila a los hombros y comencé a caminar en dirección a ésta. Durante el camino, divisé a mucha gente en bicicleta que me hizo añorar la mía. Aunque realmente no hacía un buen día para ir con ella, me encantaría poder tenerla aquí conmigo para sentirme tan viva como cada vez que me subo en esta y poder sentir el viento chocar contra mi cara mientras ondea algunos mechones de mi pelo. La verdad, es que este amor por las bicicletas, comenzó en mi cuarto cumpleaños cuando mis padres me regalaron mi primera bicicleta con ruedines. Lo cierto es que no era ni la mejor ni la más bonita, pero para mí era perfecta, le tenía un total y absoluto amor incondicional. Un año más tarde, mis padres se dieron cuenta que cada vez, ésta se iba deteriorando más y más por su uso, y era evidente que necesitaba otra, pero como en ese momento no tuvimos el dinero suficiente para permitírnosla, me tuve que conformar con la de mi hermano, que aunque no estaba tan mal como la mía, no era exactamente la idea de bicicleta de niña que yo tenía en mente con cinco años. Además, durante ese periodo, aprendí a montar sin ruedines, hasta que meses más tarde, vinieron las navidades y con ellas, la deseada bicicleta. Los años siguientes fueron iguales, siempre fiel a mi bicicleta, hasta hace apenas unos meses antes de venirme a Londres. En verdad, estuve intentando traérmela, pero al final, me fue imposible y aquí estoy, por las calles de Londres con una sonrisa melancólica recordando viejos tiempos.
Cuando llegué a la Universidad, fui directa a la secretaría, intentando disipar los pensamientos anteriores de mi mente. Una vez allí, me pidieron que esperara unos minutos para encontrar los papeles que me faltaban por completar y a continuación, después de habérmelos entregado, empecé a rellenar algunos datos que efectivamente no había puesto. Al finalizar, me despedí educadamente de la secretaria, y salí de la sala, pero al abrir la puerta de esta, no me esperaba encontrarme con aquella persona - Madre mía, este chico tiene un don para aparecer en los momentos y lugares perfectos...-pensé exasperada
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¡Hola a todo/as!
Ruego me disculpéis por lo corto que ha sido este capítulo, pero aparte de que quería que terminara en esta escena, no he tenido tiempo para escribir otro, aunque la semana siguiente prometo será más y mejor.
Por cierto, ¿no os ha pasado nunca que habéis escrito una cosa, no os ha gustado, lo borras, lo intentas volver a escribir, pero estas tan frustada que no puedes hacerlo? Bueno, pues si no os ha pasado, a mi sí, y espero que no os pase porque es horrorosamente horroroso, he estado incluso a punto de tirar el ordenador por la ventana...
En fin, después de este ataque que he tenido hace un par de horas, ¿quién creéis que es la persona con la que se encuentra Carol al salir de secretaría? ¿Os ha pasado alguna situación parecida a la de Carol y las bicicletas? No dudeis en comentar para contarme todo, me encanta leeros.
¡AH, ANTES DE QUE SE ME OLVIDE! He estado pensando nombres para poneros porque soy una maniática con poneros un nombre,(lo sé matadme, os dejo) pero había pensado a lo mejor mentes frustadas, o lectores incomprendidos o... no sé, lo siento, no soy buena para los nombres, así que por favor, ayudadme.
No me voy a demorar más porque en España son las dos de la madrugada , mañana es lunes y además, por si fuera poco, tengo que madrugar.
Gracias por leer. Voten y dejen sus comentarios.
Kisses :)
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1.721
Fiksi RemajaUna chica sencilla. Un chico incógnita. Un karaoke que definitivamente entrelaza sus caminos. Pero, ¿qué pasa si esto ocurre? Sumérgete entre las páginas de esta novela llena de romance, misterio y aventuras junto a nuestros protagonistas ¿Estás pre...