Mundos Opuestos (YayoGutierrez)

Capitulo 33

MARATON 1/3

Me despierto un poco aturdida, me duele la cabeza y no me siento ninguna parte de mi cuerpo. Sigo con los ojos cerrados, cuando empiezo a despertarme un poco más, noto que algo está haciendo pequeños círculos en mi espalda desnuda. Giro mi cabeza y abro los ojos lentamente. Espero a que mis ojos se acostumbren a la claridad del cuarto para abrir los ojos completamente. Lo primero que veo son sus ojos que me miran a los ojos, sus labios son una línea recta, su cara no expresa ningún sentimiento. Siento un escalofrió en mi espalda cuando dejo de notar su dedo haciendo círculos.

- Buenos días- digo con una voz ronca.

La cabeza me duele, maldita resaca, hago una mueca con mi boca.

- Esto es muy raro- dice.

Su voz entra por mis oídos como una dulce melodía, noto como mis mejillas se enrojecen un poco, cierro los ojos. Me cuenta un poco asimilar lo que me dice ¿Qué es raro?

- ¿Raro? ¿El que es raro?- le pregunto abriendo los ojos de nuevo.

- Que sigas aquí, jamás cuando me he despertado seguía la chica a mi lado.

Hago otra mueca con mi boca, el dolor de cabeza aumenta y siento algo extraño, me está echando.

- Lo... Lo siento, ya me voy.

Me di la vuelta en la cama y me senté, tapándome con la sabana, le daba la espalda a Yayo.

- No...- empieza a decir Yayo- No te vayas... No... no sé.

Note lo confundido que estaba en su tono de voz y a la vez note lo asustado que estaba ¿asustado de qué? Me gire, sin dejar de taparme y mire a Yayo. Él tenía la mirada puesta en la cama.

- ¿Qué te pasa? ¿Qué tienes?- le pregunte.

Yayolevanto poco a poco su mirada y se encontró con la mía. Levanto su mano temblorosa y la puso detrás de mi cabeza y la acerco a él. Veo como Yayocierra los ojos, yo cierro también los míos. Noto sus labios sobre los míos, empieza siendo un beso muy tímido, pero no sé porque me encanta. Yayoempieza a acariciar mi pelo y su otra mano la pone en mi mejilla, con su dedo gordo me la caricia. No sé si es porque estoy muy sentimental, pero me entran ganas de llorar. Yayoabre sus labios y besa por separado cada labio mío, separándose lentamente de mí. Abre los ojos y se encuentra con mis ojos cristalizados, pestañeo lentamente y lo vuelvo a mirar. Vuelvo a notar sus labios sobre mí, esta vez es un beso con más pasión.

Lo empujo lentamente y bajo las sabanas me subo encima de su cuerpo, poniendo mis manos en su pecho desnudo. Me separo de sus labios y lo vuelvo a besar. Yayopone sus manos en mi cintura casi tocando mi trasero, luego empieza a bajar lentamente hasta posar las manos en mi trasero y pegarme más a él. Empiezo a besarle agresivamente, expulsando un gemido cada vez que me separaba de sus labios. Yayose sienta un poco en la cama haciendo que me siente en sus piernas, la sabana ya no cubría nuestras cuerpos. Yayopone su mano en mi espalda y me abraza, escondo mi cabeza en su hombro y le beso el cuello. Estamos unos minutos así, solamente abrazados, un abrazo muy reconfortarle, pongo mis manos en su espalda y me pego más a él... Entonces me da por pensar ¿qué día es hoy? Miércoles... Hoy hay clases. ¿Dónde estoy yo? En la cama de Yayo.

- Oh, no- me separo de Yayolentamente.

- ¿Qué pasa?- me pregunta.

- Hoy hay clases, estamos faltando.

Yayosonríe, la primera vez que le veo sonreír en la mañana.

- Las clases empezaron hace bastante tiempo.

- ¿POR QUÉ NO ME DESPERTASTE?- me empiezo a alterar, no quería faltar a clases, quizás si faltaba llamarían a mis padres o algo.

- Te veías muy bella durmiendo.- pone un mecho de mi pelo castaño detrás de la oreja- Además, creo que con la resaca que tienes que tener no podrás ni mantenerte de pie.

Me sonrojo y miro hacia abajo.

- ¿Hice muchas tonterías ayer?

- No sé si le llamas tontería a subirte a una barra y hacer un striptease.

- ¿Qué?- pregunte atónita ¿eso había hecho ayer?

- Era una broma, pero te falto poco, te subiste a una barra y empezaste a bailar.

- Oh, Dios...- me llevo la mano a la cabeza.

- ¿Sueles beber?- me pregunta.

- No, nunca, esta fue mi primera borrachera.

- Me alegra saber que estoy en casi todas tus primeras veces- me sonríe.

Me sonrojo y le beso en los labios dulcemente, me separo con los ojos cerrados y a los segundos los abro.

- Deberíamos ir a clase, aunque solo sea a dos.

- Lo veo una tontería.

- Pues yo no lo veo tontería.

Me quito de encima de sus piernas y me iba levantar, tapándome con las sabanas, pero algo me coge de la cintura por atrás y hace que caiga de nuevo en la cama.

- Yayo...

Noto los labios calientes de Yayoen mi cuello, se me eriza la piel.

- Quédate- me susurra al oído.

- ¿No dijiste que ninguna chica estaba cuando te levantabas?

- Sí. Pero tú no eres una chica más, tú eres ____.

Noto sus brazos que rodean mi cintura bajo las sabanas, me aprieta a él.

- Quédate en esta cama, conmigo, desnuda- me susurra al oído.

Su voz demasiado seductora, me pongo como un flan, cierro los ojos.

- ¿Por qué, Yayo ¿? ¿Por qué me pongo así?- susurro.

- Porque te pongo nerviosa, porque te seduzco, porque te tengo loquita.

Yayosube sus manos de mi cintura a mis senos y los aprieta, gimo.

- Ah, no...uhm.

Yayome muerde el cuello mientras masajea mis senos, me empiezo a excitar, noto cosquillas en mi feminidad, doblo las piernas evitando correrme. Yayodeja a mis senos en paz y baja sus manos por mis curvas hasta mis piernas, las abre despacio y noto su dedo dentro de mi feminidad. Doy un pequeño salto, Yayoempieza a hacer pequeños círculos dentro de mí.

- Ya, ya.

Yayosin parar de hacer círculos, me empieza a besar el cuello y a morderme el lóbulo de la oreja. Empiezo a gemir y noto algo duro en mi espalda. Entonces empujo el brazo de Yayo, sacando sus dedos de mí bruscamente. Me voy al cuarto de baño corriendo. Me tapo con la toalla que había, me la ato al cuerpo. Me echo agua en la cara. La cabeza me duele. Me quede con ganas de más, pero no, no quiero que las cosas sean así, no quiero más sexo sin amor, no y es no.

Salgo del baño y Yayollevaba unos pantalones de baloncesto y sentado a la orilla de la cama. Recojo mi ropa que estaba esparcida por el suelo, noto la mirada de Yayoen mí. Cuando la recojo me meto en el baño y me la pongo. Cojo aire y salgo del cuarto de baño.

- Me... me voy.

- Adiós- dice fríamente.

- No, no puedo más, no puedo seguir así- digo con lágrimas en los ojos.