Una Eterna Amistad. Cap #3

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Desde la muerte de mi padre ya han pasado 8 años, así que estoy en la escuela preparatoria cuando ingrese a el salón de clases que me correspondía, vi a alguien muy parecido a aquel niño que lloraba en frente de la tumba de mi padre, No le di importancia y me senté en un pupitre, y empecé a leer un libro, entonces alguien de la nada me preguntó...
-¿Cómo te sientes?
Me sorprendí mucho, era aquel niño, el mismo, era igual como lo describía, me hubiera gustado contestarle, pero estaba muy sorprendido así que me dijo con una sonrisa...
-deja de poner esa cara, ya nos habíamos visto cierto?...aunque en una mala situación, por eso te pregunto cómo estas...
-estoy bien, parece que el tiempo hizo lo suyo y cada día lo voy superando, y ¿cómo te llamas?
-me llamo Evan Watson. -así que es extranjero.
- ¿y tu madre? ¿Como esta?
-ella también lo supera, ya casi no llora, quiero decir, no la voy a dejar llorar, por eso cada vez que tengo tiempo la veo y hablamos de un tema gracioso de la televisión o algo.
-me parece bien, quisiera ser tan fuerte como tú, superar así la muerte de alguien tan querido, y que luego días después la gente te lo recuerde mientras lloran.
-si esa parte fue muy dura...
-ya se! Seamos amigos, así podre ir a verte a tu casa
-¿por qué necesitamos ser amigos? Mi madre te conoce, así que no hay necesidad.
-no lo decía por eso, lo decía porque en serio quiero ser tu amigo, aunque por ley somos primos, pero ya que estamos en la misma escuela llevémonos bien, así tu madre no se sentirá tan sola, y además entre más personas haya es mejor.
-bien, pero voy a pasar la mayoría del tiempo en casa así que no creo que tenga tiempo de salir a fiestas o algún otro sitio.
-no te tienes que preocupar de eso, si tengo algo de tiempo libre, voy a ir a tu casa, así que dame tu dirección y tu celular.
-bien.
Así como él dijo después de estudiar iba a mi casa, y cuando estábamos en el colegio me llamaba para hablar en el descanso, aunque a mí eso no me interesaba el insistía en que estará con él y las personas a su alrededor decían siempre cosas positivas de él, no recuerdo a alguien que dijera algo malo de él.
-parece un buen niño seguro sus padres lo aman. Pensé mientas iba a la preparatoria.
-¡hola!
(salió de la nada para saludarme y eso me hacía feliz, con tan solo verlo también, al principio creí que era solo amistad, pero estaba confundido, lo que sentía por él no era una simple amistad, pero no le podía decir lo que sentía, no me volvería a hablar)
-hola
-¿estas libre el sábado?
-sí, ¿por qué?-tengo un mal presentimiento
-¿quieres ir a una cita a ciegas con unas compañeras de mi clase?-este era el mal presentimiento.
-no tenía palabras, y mucho menos negarle con esa mirada de "lo estuve esperando desde el lunes"
-bien voy por ti a las 7:30
-esta...Bien...
Desee que el sábado nunca llegara, pero tarde o temprano tenía que venir, me la pase toda la tarde tratando mil y una formas para poner una excusa para no ir, pero no encontré ninguna.
-shinsuke, escuche de Evan que iban a ir a una cita a ciegas -ah es mi madre, estaba colocando una sonrisa muy grande, y no es bueno.
-Ahora que lo pienso, tu no me dijiste que tipo de chicas te gustaban...así que es un buen momento para que me lo digas- maldición tengo que inventar algo rápido, no le puedo decir que solo estoy preocupado por evan..
-con los pechos gran....digo con buena personalidad-mi cara se ve sospechosa ¡me va a descubrir¡
- mi madre me miró fijamente*- no mientas de seguro vas a ver que no se le acerque nadie a evan.
-(¿ME DESCUBRIÓ CON SOLO MIRARME? ¿Puede leerme la mente?), claro que no y si lo hiciera solo iría a ver que mujer se le monta encima, de seguro traman algo-eso lo dije sin dudas, puede que deje de preguntar
-bien que te vaya bien...
Minutos después tocaron el timbre, luego mi madre grito...
-es evan, baja rápido
(ya llego? Apenas son las 7.00 y ¿ahora qué? )
-*suspiro*- ya llego el momento de la verdad.

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