Lo que te di de Mí...

CAPITULO 11: "Para amarte, necesito una razón"

CAPITULO 11: "Para amarte, necesito una razón"

Lucas

Después de bailar varias de las canciones y hacer bromas, llego el momento de mi regalo. Salgo de manera sigilosa del local y me dirijo a la parte de atrás de mi camioneta. Tomo el estuche con cuidado, espero que le guste tanto como me gusto a mí hacer esto por ella.

Al entrar nuevamente, ella está dándome la espalda. Tapo sus ojos delicadamente con la mano que tengo libre y le hablo al oído, para que solo ella pueda escucharme, y todo bajo la atenta mirada de los presentes.

- No te conozco de la forma que a mí me encantaría conocerte. No tengo conocimiento de tus secretos y tus miedos. Aun no sé cuáles son tus cosas favoritas, aunque espero convertirme en una. No tengo ni la menor idea de tus verdades y mentiras, y también desconozco tu pasado y orígenes.

>>Pero lo que si conozco y de lo cual estoy seguro, es que me traes loco, me haces querer ser mejor de lo que un día fui. Y lo que más deseo en este momento es que no dejes nunca de sonreír. Es por eso que quise ser parte de una de las cosas que más amas en tu vida, y me tome el atrevimiento de conseguir esto para ti.

Descubro su vista y ella se da la vuelta lentamente para estar de frente a mí. Al observar lo que sostengo en mi mano izquierda se asombra, llevándose una mano a la boca, y abriendo los ojos enormemente. Y es justamente la reacción que esperaba.

- ¿Me compraste una guitarra? - cuestiona Vicky, aun mirándome con la sorpresa reflejada en su rostro -, no puedo creer que hicieras eso, yo solo te compre un CD.

- Creo que te mereces esto y mucho más. ¿No la piensas abrir? - le tiendo el instrumento para que lo tome, cosa que hace sin dudar -. Espero te guste el modelo que elegí.

Abre el estuche y saca la hermosa guitarra negra que compre para ella. En realidad no entendí cuando Ricardo me dijo que escogiera una de ese tipo, no entiendo de instrumento musicales, pero la guitarra en si es hermosa, hasta ganas me dieron de aprender a tocarla.

- Wow - dice mi Muñeca mirándome fijamente -. Es hermosa y perfecta, debiste de gastar mucho en ella. No quiero aceptarla, pero me es imposible rechazarla. Es estupendamente maravillosa.

- Devolverla no es una opción, así que tendrás que quedártela, porque la conseguí única y exclusivamente para ti.

- ¡Gracias Lucas! - dice mientras se guinda de mi cuello, y me da un abrazo, de esos que hacen que dos personas se fundan en una sola, yo sin perder la oportunidad, la tomo de la cintura y la pego mas a mí. Mientras ella me susurra las gracias en el oído, e inmediatamente escalofríos recorren mi espina dorsal y vello de mi cuello se eriza al sentir la calidez de su aliento.

- De nada Muñeca, te mereces eso y mucho mas, para mí no es nada, y sin embargo es mucho hacerte feliz.

- Pues para mi si es mucho - me mira a los ojos, aun con sus brazos en mi cuello -, y significa demasiado viniendo de ti. Así que gracias - me da un beso en la mejilla, y se retira para ir a tomar la guitarra y empieza a afinarla.

No pensé que un gesto tan simple significara tanto para ella. Dude cuando Ricardo me dijo que lo mejor que podía regalarle era una guitarra. Pero veo que si acertamos ambos en el regalo.

- En realidad el merito no es solo mío - le digo, y ella me mira inmediatamente -. Tu primo me ayudo a escoger el regalo para ti, y si que tenía razón al decir que te iba a gustar.

- Pues me alegra que te haya ayudado a escoger esta hermosura para mí. Pero el merito es solo tuyo. Tú fuiste el de la idea, y me agrada que te la lleves bien con Ricky.