Capítulo 5

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Gracias a dios, Cleare ni se asomó por acá, así que estuve sola con mis pensamientos, asimilando lo que sentí hace un rato con mi acosador.

Media hora después, estoy guardando mis cosas para irme a reunir con él.

Salgo, al levantar la vista, está él, delante de su Mercedes negro, no es con el cual choque, es un deportivo, sus ruedas son gigantes y está casi rozando el piso.

Camino lentamente hacia él. Cuando estamos frente a frente y ya siento su olor me siento en armonía absoluta, no espero a que el me bese, en cuanto me toma de la cintura, me pongo en puntitas y beso sus labios, con delicadeza, él me toma el rostro e introduce su habilidosa lengua en mi boca. Cierro los ojos disfrutando esto, su boca es tan carnosa y suave, es tan intensa.

-Hola, otra vez...-murmura soltando un instante mi boca.

-Hola- susurro con una leve sonrisa.

Me suelta y abre la puerta del acompañante indicándome que suba. Eso hago, entonces me siento sobre el cuero frio de la butaca, acomodo la cartera en mi regazo, abrocho mi cinturón, él se acuclilla fuera del coche poniéndose a mi altura.

-¿Tan pronto, te atas a la vida?- dice jugueteando con el lazo del cinturón.

Sonrío.

-Costumbre...-murmuro. Su mano sostiene uno de mis bucles y lo enrosca en uno de sus dedos.

-Estás preciosa, no sé si te dije, esta mañana y esta tarde...-

-Creo que no, sólo te limitaste a hacer otras cosas... pero gracias por el cumplido-

-Es que, con vos... licy, prefiero más hacer, que decir- murmura clavando sus ojos ámbar deseosos en los míos...

-Entonces hacé, lo que desees conmigo...- digo con vos suave.

Al instante me arrepiento de haber sido tan lazada. ¿Qué iniciativa puedo tener yo con él?, soy su presa, y en mi vida, encaré a un hombre.

-Siempre, te lo afirmo...-murmura levantándose, pero antes de hacerlo, me da un mordisco en la mejilla y gruñe, sonrío. Cierra mi puerta, rodea el coche y sube al volante.

¿Siempre será así, siempre voy a sentir esto, cuando lo tengo cerca?

Observo sus manos aferradas con decisión al volante, instantes después, con toda soltura se incorpora a la avenida, es un lujo verlo manejar. Comienza a sonar música por los parlantes.

-¿Qué tipo de música te gusta, licy?- dice

-House principalmente, pero escucho de todo un poco- digo

Continúa con su atención en la carretera, luego de dejar lo que estábamos escuchando.

-¿qué es, lo que estamos escuchando?

-Moby- susurra

-Ah, sí conozco de nombre. Esta bueno- susurro. Coloca su mano derecha sobre mi regazo, mi cuerpo reacciona a su tacto de inmediato, provocándome ese cosquilleo.

-¿a dónde vamos?- pregunto

-A un lugar de cocina francesa... te va gustar- dice pero no tengo idea. Nunca como afuera, menos en restaurantes como lo que creo que él debe concurrir.

-De acuerdo- digo y entonces me volteo para observar con más detalle el interior del coche.

-Es muy chiquito atrás- digo mirando hacia atrás del coche.

-Si, sólo para dos...-

-Es más deportivo que el otro... me gusta más- murmuro.

Antes de subir, las ruedas llamaron mi atención, son gigantes y anchas.

Incesante DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora