Drew y yo teníamos 11 años cuándo nos conocimos.
Estábamos en cuarto de primaria, él era nuevo y yo también, cuándo era recreo nadie nos hablaba, y por casualidad nos sentamos en el mismo lugar..
-Oh, lo siento, creí que estaba sólo..
Miré hacia el frente y él estaba ahí, sus ojos eran gris claro, su cabello ondulado de color miel, sus mejillas rosadas.
En ese momento sentía la cara ardiendo de la vergüenza.
-No hay problema, la verdad es que estaba sola, si quieres puedes sentarte aquí.
-Okey- Su sonrisa era muy hermosa, sus dientes blancos, labios delgados, simplemente bello.
-Bien, como te llamas?- Me preguntó y yo como torpe mirándolo.
-Mmh me llamo Natalia Thompson..Y tú?
-Drew Smith..Eres nueva también?
-Sí, pero al parecer a nadie le agrado aquí..
-No digas eso..a mi me agradas..- En ese momento sentía que mi cara estaba demasiado roja, pero para disimular reí un poco.
-A mi también me agradas
Sonó la campana y entramos al salón, él se sentó conmigo en lo que restaba de la clase.
La maestra nos dijo que como nos sentamos, así seria por el resto del año, mire a Drew y él me sonrió, desde ese momento fuimos los mejores amigos.
Cuándo cumplimos los 12 el me propuso ser su novia, fue un 7 de agosto para ser exactos, la mejor fecha sin duda alguna.
Es la mejor persona que eh tenido en mi vida y espero tenerla siempre a mi lado.
Cuándo llegue a mi casa después de haber estado en casa de Drew, mi padre estaba ahí, en la sala de estar, leyendo su tonto periódico, cuándo traté de subir las escaleras él me hablo.
-Natalia, dónde estabas?- Me hablo enojado.
-Estaba en casa de Drew papá - Le contesté un poco desesperada.
-En la noche tendremos visitas, así que hay que arreglarse bien mi niña.
-Siempre lo mismo contigo Papá - lo dije en voz baja pero escuchó.
-También es lo mismo siempre contigo hija- Me dijo muy frío.
Al carajo, yo no bajaré para dar una cara que no tengo.
Subí a mi cuarto, me tiré a la cama boca abajo quedándome dormida lo que resta de la tarde.
-Hija, mi niña, despierta..
Sentía que alguien me hablaba, me levante y miré que era mamá.
-Cómo te fue hoy mi cielo?
-Mmh, bien mamá, fui a casa de Drew, ya sabes que cumplimos 5 años de novios! Y a ti como te fue?
-Oh mi pequeña, me da gusto por ti y por Drew y pues ya sabes, salieron muchos casos en la oficina pero bueno al rato me cuentas todo y hablamos bien porque ahora tienes que bajar, hay visitas.- Mamá hizo una mueca de aburrida al igual que yo.
Cenas de este tipo nos aburren. Luego reímos al ver nuestras caras, y Ahora a arreglarse se a dicho.
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El diario de una adolescente.
Ficção AdolescenteNatalia Thompson, una chica de buen corazón pero muy confundida con respecto a lo que siente.