Décimo Tercer Muro [Allen / David / Tania]

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POV : TANIA

—¡Venga, que quiero ir a casa de una maldita vez! —gruñó una mujer, molesta— ¡Déjense de sentimientos y tonterías! —¿Qué estás diciendo? ¡Esto es sólo un funeral, no una telenovela!

... No sé cuándo... pero le di una bofetada.

(...)

— ¿Quieres jugo? —le pregunté a David, quien estaba sentado en uno de los sofás del salón.

— No, está bien —dijo moviendo también su mano.

— Bueno —dije sentándome en otro de los sofás— David —levanté la cabeza y lo miré— En verdad... en verdad te agradezco que te preocupes por Allen... Pero no creo que sea bueno que lo veas.

— Sí, comprendo —aún mantenía la vista en el suelo— Está muy triste, aún más que tú... Puede que sólo los conozca desde hace tres semanas —continuó— pero me han tratado muy bien y me siento mal por no poder apoyar a Allen.

— É-Él no ha salido de su habitación hoy —dije luego de un rato— tampoco ha aceptado comer desde ayer —agregué— si vas a intentar hablarle, por favor primero haz que coma un poco —le supliqué.

Me levanté y me dirigí a la cocina, sacando un plato del microondas y sirviendo en un vaso algo de jugo de naranja.

— Mamá dejó esto para que comiera como almuerzo. Pero cuando no pude hacer que comiera —le entregué el vaso mientras yo sostenía el plato— sólo se terminó enfriando.

Caminamos hasta la puerta de Allen y David tocó con sus nudillos.

— ¿Allen? —preguntó, aunque no obtuvo respuesta—Voy a entrar, ¿vale?

Silencio. David abrió y vimos en la cama un bulto envuelto en sábanas, rápidamente logramos oír un leve sollozo proveniente de ese bulto. Allen estaba despierto. Nos acercamos y dejé el plato en la mesita cercana, a lo que David reaccionó dejando el vaso junto a la comida.

Me senté en el suelo con la cama frente a mí, David me imitó. Estuvimos un rato sin decir nada mientras yo acariciaba las sábanas, ya que sentía que bajo ellas estaba un brazo.

—¿David? —dijo de repente en voz baja.

—¿Allen? —preguntó como respuesta con una voz tranquila, pero su rostro se había asustado un momento.

Al parecer pensaba que era David quien le estaba tocando, después de todo yo no he dicho nada desde que entramos. Decidí levantarme en silencio y le susurré en su oído.

—Por favor, haz que coma —Acto seguido salí en silencio.

POV : DAVID

Asentí, pero parece que Tania no lo notó. Salió y cerró la puerta. Pasé un rato junto a Allen en silencio, ninguno de los dos se movió, pero podía oír de vez en cuando sus sollozos. No sabía en qué parte de ese gran bulto de sábanas estaba su cabeza, ya que todo su cuerpo estaba oculto.

— ¿Sigues ahí? —preguntó.

— S-Sí, aquí estoy.

— ¿Puedes abrazarme? —me tomó por sorpresa, pero lo hice. Rebusqué en las sábanas y logré encontrar su oreja.

—¿Así está bien? —estaba algo incómodo con este intento de abrazo.

De repente empezó a moverse y su cuerpo apareció entre las sábanas para luego lanzarse hacia mí y rodearme con sus brazos. Sólo tenía puesta una camisa y unos boxers. Empezó a llorar fuertemente y apoyó su cara; pegajosa por las lágrimas secas; en mi hombro. Lo abracé de vuelta.

[Yaoi] Muros y AbismosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora