Hasta el día en que te vayas (NIALL HORAN)

Capítulo 26 "Fireproof"

Niall miró a Jane con suspicacia. Ella no se atrevió a devolverla.

-¿qué sucede? -preguntó el con la mayor sutileza que podía -¿no me lo dirás?

Jane alzó la vista y se encontró con un mar tormentoso.

-es difícil...
-me habías dicho que dirías algo aquel día en la cena, aunque lo olvide ¿era ese secreto del que tanto hablan?
-Niall, todo va a cambiar te lo diga o no
-me he encontrado a dos sujetos que intentaron alejarte de mi lado -murmuro cansado -y ambos han mencionado que me ocultas algo muy importante, creo que es evidente que es algo grande ¿debo preocuparme? -Jane tragó saliva
-depende
-¿depende de que? -entrecerró los ojos y se acercó a ella, le estrujo las manos -no tengas miedo...yo siempre te amare pase lo que pase

Se encontraban en la habitación de ella, Niall la había seguido después de su segundo escape. Los guardias de seguridad se habían llevado a Ryan Mer y el chico no paraba de gritar que lo soltaran y que los demandaría. Aunque Management no tardaría en tomar cartas en el asunto y equilibrarlo por supuesto, Niall sabía que se llevaría un santa regaño por el escándalo. Pero eso lo vería luego, ahora había cosas más importantes...

Jane tomó sus manos con fuerza, las lágrimas salían de sus ojos. Le gustaría que la tierra la tragara en ese mismo instante. Niall notó que se tensaba.

-no puede ser tan malo
-te irás cuando lo sepas -dijo con afirmación -y no te culparé por ello
-hey! -susurro -oye...estoy aquí ¿lo ves? -hizo que lo mirara -no me iré a ninguna parte Princesa, te amo más que a nada -rozó su anillo de Esmeralda -es mi promesa ¿lo olvidaste?

Jane suspiró y asintió.

-si decides dejarme solo quiero que sepas una cosa -Niall comenzaba a sentir temor pero no lo dejo ver, tenía que ser fuerte sea lo que fuera que iba a escuchar -te amo, y te amo tanto que solo quiero que seas feliz y tengas lo mejor de este mundo, lo mereces -acaricio su mejilla -lo mereces....y jamás estaré enojada o triste o decepcionada si eso eliges
-no digas tonterías cariño, jamás te dejaré
-no lo digas ahora -sonrío de lado -aún no puedo decírtelo pero te aseguro que lo haré, no es algo que se pueda ocultar Niall
-¿estás...? -el enarcó una ceja -no estás....
-oh no -negó rápidamente -en absoluto

Si ella estaba embarazada era obvio que eso significaba que Jane había estado con alguien más meses atrás. Niall no sabia que era más doloroso, si el saber que su novia había estado con otro chico o que tendría un bebe de otro hombre. Aunque ahora podía respirar con más tranquilidad..menos mal, pensó. Además ahora le parecía una idea absurda, Jane era demasiado delgada....demasiado. Miro sus pómulos, la delgada y fine línea en sus clavículas.
Quizás ella era esa persona que te hacía correr en dirección al infierno con tal de tenerla. Era esa persona que aveces la gente tenía la fortuna de encontrar,  a su contraparte y a la vez su complemento. Su ayuda idónea, su prueba de fuego.
Lo sabía porque podría hacer lo que fuera por mantenerla a salvo y feliz, podría perdonarle todo. Jamás había demostrado ese lado, ni siquiera el mismo sabía que pudiera amar de tal forma.
Pero justo ahora en estas duras pruebas era en donde se tenían que mantener más unidos.

-¿tú me amas Jane? -preguntó cauteloso, ella contuvo al aire y lo miró como nunca
-como a nadie más he amado en mi vida

El la beso, fue el beso más frágil que se habían dado. Uno que tenía miedo a romper un cristal tan Delgado como el pétalo de una rosa. Pero a la vez fue desenfrenado, como si en los labios de cada uno hubieran encontrado la ultima gota de agua en el desierto.

....

Por supuesto que era su prueba de fuego.
A la mañana siguiente alguien había divulgado la noticia, y aunque era una verdad Niall hubiera preferido que se diera de otra forma.
Y sabía quién había sido el culpable.