Capítulo 21 "Something Great"

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Esa mañana había aterrizado en el aeropuerto de Los Ángeles en California. Quizás era su imaginación o el cansancio pero sentía que Jane se alejaba lo más posible de él. Se detuvo al final del camino a punto de bajar por las escaleras eléctricas, ella estaba más allá en una charla con Sophia, ambas tomaban café y parecían centradas en su platica.
Niall no había hablado con Jane después del concierto en Washington y se lamentaba por ello, temía que su relación o lo que fuera que se estuviese formando se cayera en mil pedazos. Al final Liam lo animó a seguirlo más allá. Se alejó echando una última mirada a su amada.

-¿y entonces...? -preguntó Sophia mordiendo un pedazo de brownie
-no pude leer casi nada...aunque no sé si sean realmente válidos -se encogió de hombros
-¿porque?
-ya sabes...no soy "la novia oficial" de Niall -lanzó comillas al aire, Sophia rodó los ojos
-no seas tonta, ambos se encantan y ya solo falta aclarar lo obvio
-eso me temo -murmuro
-¿qué?
-nada....

Era por eso que lo trataba de evitar, era tan difícil como dejar de respirar. Verlo cada día a cada momento le quemaba el cuerpo, él no poder acercarse ni tocarlo ni sonreírle y la idea de no volver a besarlo era todavía peor. Los labios de Niall eran como una droga, adictiva.
Lo había estado pensando durante la noche. Pero la idea le pesaba, el hecho de decirle que ya no lo acompañaría más y que regresaría a casa era el fin de un sueño que apenas había comenzado. Pero era por el bien de Niall.

Era eso o decirle la verdad y permitirle que sufriera si es que sentía algo por ella. Cosa que comenzaba a confirmar cada que por el rabillo del ojo notaba a Niall admirando sus pasos y su dirección. Sentía unas ganas incontrolables de ir a abrazarlo y porque no...besarlo. Incluso aunque un montón de paparazzis y reporteros estuvieran esperando más allá fuera del aeropuerto.

-es hora de reunirnos -gritó un guardaespaldas y muchos otros más hicieron el conocido círculo cubriendo el área entonces Niall aprovechó la oportunidad y se puso justo al lado de Jane, ella se sobresaltó
-déjame te pongo mis audífonos -mencionó algo nervioso sacando algo de sus bolsillos

Jane asintió sin mirarlo, esa maniobra estrella la habían estado practicando y salía realmente bien. La música en sus oídos no le permitía escuchar los muchos tantos insultos y ofensas y preguntas incómodas de los entrevistadores. Aunque no podía cubrir los carteles que la atacaban ni las malas caras que le dirigían, es por eso que Niall la cubría y Harry hacia el favor de hacerlo del otro lado.
Niall se posicionó a su frente y se los puso, mirándola a los ojos aunque ella no correspondía. Niall frunció la boca y eligió una canción.
No fue exactamente una elección al azar pero en cuanto la vio en su lista de música no pudo contenerse a ponerla.

Something Great

Jane no supo de tal intención indirecta hasta que escucho la letra, entonces ya estaban llegando a las camionetas cuando miro a Niall. ¿Acaso él había elegido esa canción adrede?
Irremediablemente se sentaron uno al lado del otro, no era que le molestara a ambos...muy al contrario. Niall ya había extrañado esa cercanía, incluso aunque fuera un ligero roce y ella sentía esa calidez de nuevo.
Jane no pudo resistirse más incluso aunque fuera orgullo, recargo su cabeza en su hombro. Niall crispó los ojos pero sonrío de lado. Pasó su mano sobre los hombros de ella y entonces la estrujo fuertemente. No había nada que temer ¿o sí? Solo fue un momento de alejamiento por algo que a Jane le había ocurrido, quizás de verdad extrañaba a su madre...quién sabe.

Después de una hora de viaje llegaron a su destino, otro hotel de lujo en donde el personal aguardaba para atender a la realeza del pop. Jane no podía negar que ser tan allegada a 1D tenía sus ventajas, de pronto la gente había pasado de tratarla como basura que limpia los batidos de fresa del suelo con su mandil, a ser atendida por tres persona a la vez cargando sus maletas mientras otras cuantas le preguntaban si prefería la hamburguesa doble con papas fritas y malteada de vainilla o el menú completo de comida italiana. Aunque el recordatorio de su pasado le hacía mantener los pies en la tierra.
Al llegar a su habitación encontró la misma vista que en la de Washington, el gran ventanal con la magnífica ciudad de Los Ángeles a sus pies. Se preguntó si esto era obra de Niall.

Hasta el día en que te vayas (NIALL HORAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora