vida rutinaria

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Casi siempre abro los ojos a las cinco de la mañana sereno, con algunos rastros de sudor; en una habitación ordenada y pulcra de punta a punta; dentro de las sabanas me preparo mentalmente a entrar a eso que es llamado rutina o más bien vida; realmente no odio el gustoso acto de la rutina, solo me parece muy agotador tener que fingir con las personas de que soy un tipo supuestamente normal como cualquier otro, y así no llamar la atención para llegar en el momento más inesperado, lo importante es no mostrar ese lado sombrío.

Pero hoy me levante desesperado y con una sensación que pinta todo con un tono gris, eso significa que algo se avecina, después de unas horas de ejercicio, camino hasta la cocina con el objetivo de preparar un buen café, pero no hay así que voy hacia esa cafetería de la esquina que recientemente abrieron. Al llegar a ella me encuentro con una fila que para algunos seria desesperante, pero para mí es el lugar perfecto para mirar las diferentes vidas e historias que la conforman, como esa joven que en el fondo se encontraba con unas ojeras y pelo desarreglado, es claro que en época de exámenes esta. También se puede ver la verdadera naturaleza del hombre, la paciencia de una persona, su aptitudes y la forma de como enfrenta los problemas; realmente es impresionante como algo tan insignificante te puede mostrar extraordinarias cosas.

Solo faltaban cinco personas para que después me tocara a mí, hasta que en ese momento un hombre de traje y de cabello negro arbitrariamente se cola en la fila; en realidad no sabe el error que acabo de cometer, pero para no equivocarme, pienso: "primero voy intentar hablarle, si responde como quiero que conteste, estará muerto de una manera muy creativa, pero si responde como no quiero morirá de la forma más decadente posible, tirado en la basura con una chuchida en el cuello y unos hematomas en todo el cuerpo".

Así que le digo: amigo estas en mi lugar, puedes hacer la fila como todos por favor.

Después de decirle eso de la manera más culta posible, y dice algo que ya mi instinto predecía: este era mi puesto antes de que entraras al local, así que "amigo" intenta quitarme.

En ese mismo instante mi rostro lanza una sonrisa inesperada por mí, pero que hace que ese hombre de traje me mire con una expresión de miedo y provoca que el de media vuelta, lo que me pareció muy raro ya que siempre intento no mostrar lo que soy realmente, lo que me hace preguntarme ¿será que mi instinto asesino está cobrando vida propia? Pero no le hago caso a eso; mientras espero por mi café planeo la forma de como matarlo creativamente. Mientras tomo ese café tan cálido y relajante se me ocurre una idea perfecta para hacerlo; para no perder el rastro de ese perfecto imbécil, tengo el precioso arte de cazar. Después de saber dónde vive donde trabaja, sus horarios en resumen su rutina y para eso solo tengo un día para hacer todo y lograr mi cometido.

Ya era de noche, faltaba poco para que el tal Steve llegara, todo los instrumentos estaban listos, cloroformo para dormirlo, cuerdas y los más primordial cuchillos; escuche un carro y sabía perfectamente que era el de él, al bajarse el del carro para llegar a su casa, me acerco de la forma más sigilosa con un pañuelo bañado en cloroformo, lo coloco en su boca y cae dormido más rápido de lo creía; los arrastro hasta su casa, le quito la ropa pero menos la ropa interior, me coloco unos guantes y un traje desechable para no dejar rastros, decido amarrarlo en la sala donde hay una chimenea y seria agradable hacerlo en ese lugar amarro sus dos brazos en direcciones diferente, y los amarro a dos esquina de la sala para lograr la imagen de fanático religioso que quiero dar; después de haber terminado la preparación en el momento justo se despierta y hace la pregunta que cualquier persona en su posición haría:

- ¿Dónde carajo estoy?

- Pregunta incorrecta amigo, la pregunta que deberías hacer es ¿Por qué estoy aquí?

Sus ojos sueltan lágrimas como un bebe sin su comida y dice:

- Bueno como tú digas, ¿Por qué coño estoy aquí?

- Esa pregunta es la correcta, amigo, simple porque te lo mereces y creo que el mundo estará mejor sin ti

Antes de que comenzara a gritar, le coloco un trapo en la boca y le digo: las personas piensas que mi marca para los asesinatos es la cruz, pero no lo es compañero, mi marca preferida es el poner el porqué de su muerte grabado en su pecho con un cuchillo especial y a ti te colocare "imbécil"; espero que haya bastante sangre, bueno comencemos.

Escribir con un cuchillo en la piel es bastante difícil pero no imposible solo me falta un poco de práctica; tuve que detenerme ya que los movimientos de Steve no me dejaban hacer mi obra de arte, solo pude hacer la I, M y la B, fueron un poco sencillas de hacer y estaban dando el resultado que quería, sangre y una muerte lenta.

Cuando estaba a punto de reanudar mi obra tocan a la puerta, mi corazón empieza a latir lo más rápido posible, no estaba asustado, sentía rabia, no porque me atraparan, sino porque no me iban a dejar terminar lo ya empezado; miro a los lados para buscar una solución, Steve estaba aturdido por el dolor pero aun así él podía oír y ver, en mi vista periférica pude ver un cuadro de una foto de una joven, así que pienso: <<mierda tiene una hija>>. Ella abre la puerta diciendo—papa estoy en casa—pero para sorpresa de ella lo primero que ve al entrar esa joven de cabello rubio, es a su padre amarrado y a mí, un loco con un cuchillo ensangrentado en mano. Ella respira hondo e inesperadamente y de la manera más tranquila me dice— ¡gracias! Porque si no lo hacía alguien lo iba a ser yo.

Cuando me dice eso no sabía que decir era bastante extraño escuchar eso en una joven, así que decido hacer lo más sensato, liberarla, el cuchillo que tenía en mano se lo incrusto a Steve en el corazón y rápidamente sus ojos se apagan, demostrando que ya está hecho.

Me acerco a esa joven que por dentro estaba asustada y le digo: deja de pensar en el odio, en la venganza, en la muerte, porque ese es mi trabajo y no quiero seguidores y mucho menos gente en mi territorio.

LA CARTA Y DIARIO  DE UN PSICOPATA ASESINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora