Le había dicho que la vería hoy, a las diez.
No sé cual será su reacción, pero necesito decirle quién soy.
Ha llegado a contarme que el chico de las notas ha vuelto y lo verá hoy.
La verdad es que quiero que vaya ahí, para que se diera cuenta de la realidad del tipo que tiene por novio.
Tocaron el timbre de descanso y mis manos sudaban.
No dejé de verla durante toda la clase.
Estaba sonriendo y ella igual me veía.
Salí y quiso acompañarme, le dije que fuera al gimnasio mejor y la vería al rato.
Pero ella no sabía que sería tan poco después.
Entré al gimnasio y me quedé sentado.
Escuché una puerta, seguido de algunos pasos, ya venía.
Henderson estaba casi a lado con una chica de un grado mayor.
Angelie les vio y los ignoró.
Eso me sorprendió.
Caminó hacía las gradas y me divisó.
Sus ojos marrones se humedecieron un poco.
Me acerqué y le dije:
-Hola, yo soy el chico de los post-its azules.
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Notas a ella.
Teen FictionElla era la chica de la sonrisa rota. La que se sentaba justo a un asiento atrás. Podría decirle, mil versos, poemas, acerca de su piel blanca y su cabello negro. Pero aquí estoy, pegando rídiculos y cursis post-its en su libreta de tareas.
