Robando tu Corazón. (En espera)

(XI) De nuevo al juego.

Me tire en la cama, encendí la música en el celular mientras miraba hacia el techo. Hace mucho que no salía, mi vida estos últimos 6 meses se basaba en ir al supermercado a hacer cualquier diligencia y estar en mi cuarto, a veces entrenaba con Lucas pero no más de ahí.

Mentiría si dijera que no extraño mis bizarros encuentros con Dragón Negro pero prefiero mantenerme alejada, Lucas tiene razón, mientras más tiempo pasara cerca de él más me atraería y no quería ligar mi trabajo con la vida personal.

No es que no haya habido más trabajos, seguíamos teniendo que hacerle algunos favores a ciertas personas pero ya yo no participaba, me quedaba en la parte lógica y si tenía que ir a la escena del futuro crimen no entraba. Una vez vi salir a Dragón Negro, parecía decepcionado, intentaba mentirme y decir que no era porque no había participado en el robo, hasta dejo que Lucas se fuera con el dinero. Lo bueno fue que él no me vio a mí.

-Gabriela- Kimberly llamo mi atención, la mire.- Tenemos que hablar.

-¿Al salón de reuniones?- Me senté en la cama.

-Si.- Salió dejando la puerta abierta, su cara era seria así que debía ser algo importante.

Me senté en una de las sillas y apoye mis codos en la mesa, el cuarto estaba bien iluminado, era un “cuarto secreto”, era subterráneo y evitaba toda entrada de señal, para que no fuera encontrado. Aquí guardábamos todo lo importante, como por ejemplo el cuadro si “Marcos” me lo hubiera dado. Aún sigo dudando si ese es su verdadero nombre.

-¿Entonces?- Lucas estaba un poco desesperado para que esto terminara, estaba viendo su preciado juego de baloncesto y nadie, absolutamente nadie, debe molestarlo mientras ve su juego.

-Decidí hacer esta reunión porque es algo importante, tenemos un trabajo.

Asentí con la cabeza.- Y te necesitamos Gabriela.

-Pero yo siempre ayudo.

-Te necesitamos en el campo de juego, no haciendo la logística.

-Para serte sincero no eres muy buena en eso… lo siento.- Lucas me miraba serio, ¿Por qué no le disparo y ya?

-¿En serio te casaste con este imbécil?

-Cállate Lucas.- Kimi se cruzó de brazos

-No puedo, hare lo que sea menos eso, ustedes lo saben.

-Estuve pensando en un plan en el que no estuvieras pero no se pudo, esto es muy importante para nosotros ya que nos ofrecen una gran cantidad de dinero y lamento decirlo de esta manera pero como la líder te lo estoy ordenando.

Me quede en silencio, en una parte pensaba que era un estupidez todo esto de Dragón Negro, solo tengo que entrar, robar y ya, no hay por qué involucrar los sentimientos pero por otra parte no quiero verlo.

-… ¿Por qué yo y no Lucas?- Lo señalé con la mano.

-Lo necesito ayudándote desde afuera, probaremos nuevo equipo. Es una orden Gabriela punto.

-Ok…- Me levante y me fui.

Ordenes son ordenes, no iba a discutir con ellos.

*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*

-Repasemos el plan.- Estábamos todos sentados en la sala, para nosotros esto no era más que una conversación banal, me imaginaba que pensaría la gente si esto fuera un “reality show”. Hace dos semanas que he estado preparándome para esto, entrene más fuerte y creo que estoy lista.

-Entro por la galería desde el techo, corto el vidrio, cuento hasta 20 y bajo las escaleras, el tercer cuarto a la derecha, puerta de caoba con perillas color dorado, caja fuerte, diamante, punto.